Alberto Witvrun.-Entre los ajustes para fortalecer la campaña de la candidata de Va por Hidalgo Carolina Viggiano Austria, en el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se realizaron ajustes y nombramientos, para posicionar a su equipo, destacando el de delegado general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) José Antonio Rojo García de Alba, el menor de la dinastía Huichapan.
José Antonio Rojo, que parecía que llegaría a gobernador, en los últimos dos sexenios estuvo prácticamente desaparecido, luego de que peleara la candidatura a gobernador en 2005 con Miguel Ángel Osorio Chong y en 2011 con Francisco Olvera Ruiz, aunque en la segunda quien estuvo cerca de ser postulado fue su hermano mayor Jorge Rojo García de Alba.
Pepetoño perdió la posibilidad de ser gobernador al renunciar a la Secretaría de Gobierno a 129 días de la administración de Manuel Ángel Núñez Soto, a quien Jesús Murillo Karam llevó a la gubernatura, haciéndolo ganar el proceso interno a José Guadarrama Márquez y el constitucional rompiendo el bloque opositor imponiendo como candidato panista a Francisco Xavier Berganza y debilitando la candidatura de +Miguel Ángel Granados Chapa.
Jesús Murillo, heredó a Manuel Ángel Núñez a José Antonio Rojo, como secretario de Gobierno, posición de privilegio que lo puso en la antesala de ser el sucesor del actopense, con lo cual el realmontense “pagaba” su deuda política con su tutor Jorge Rojo Lugo, pero las diferencias internas llevaron al menor de la dinastía Huichapan a renunciar en dos ocasiones y dejar esa posición a los 129 días.
La historia de lo sucedido la conocemos, su relevo en la Secretaría de Gobierno fue Miguel Ángel Osorio Chong, que inició el sexenio nuñista en Desarrollo Regional, y desde ahí consolidó su carrera política que incluye una diputación federal, la gubernatura, la Secretaría de Gobernación y hoy una curul en la Cámara Alta. Ahora en su regreso hay quien asegura que el tiempo acabará demoliendo el mito de que no pelearía nuevamente por la candidatura al gobierno de Hidalgo, aunque también hay quien sostiene que aprender tarde de sus errores, es no aprender; por ahora le corresponde contribuir a la posibilidad de triunfo de Carolina Viggiano y de conseguirlo, otra vez el tiempo tendrá la palabra.