Juan Manuel Pérez. Tulancingo de Bravo.- En medio de la indignación social en la región, Balbina Garrido madre de dos de las tres jóvenes mujeres asesinadas, exigió justicia para sus hijas encontradas este miércoles sin vida junto a una amiga en la colonia San Isidro, en Santiago Tulantepec
Frente a la Agencia del Ministerio Público, narró que el lunes fue la última vez que vio a sus hijas, quienes decidieron independizarse, pero vivían a un par de cuadras de su domicilio. La mayor, Yesenia Yoselin Sánchez Garrido, de 25 años, trabajaba en un laboratorio de análisis clínicos, mientras Guadalupe de Jesús, de 23 años, cursaba el último cuatrimestre de la licenciatura en Criminalística, en la Universidad Tecnológica de Tulancingo y laboraba en una tienda de autoservicio y tenía cuatro meses de embarazo.
De la amiga de sus hijas, sólo sabe que se llamaba Daniela, que era originaria de Tijuana y que se conocían desde hace un año aproximadamente, pero llevaban cinco meses viviendo juntas, además de que esta última fue paramédico en Cruz Roja, delegación Tulancingo y a la fecha prestaba sus servicios en la dirección de Protección Civil de Tolcayuca.
