En San Pedro Sula, donde el futbol suele abrazar tradición y pasión a partes iguales, el Club Pachuca será esta noche el invitado de honor en la fiesta más importante del año para el Club Deportivo Marathón.
El histórico estadio Morazán recibirá a los Tuzos a las 19:00 horas, en un duelo amistoso que servirá como homenaje al centenario verdolaga y, al mismo tiempo, como el primer capítulo del nuevo ciclo hidalguense bajo el mando de Esteban Solari.
El entrenador argentino llegó a Hidalgo a inicios de semana, tomó control inmediato de los trabajos y, con apenas unas sesiones de reconocimiento, ya prepara su primera alineación blanquiazul. Solari contará con casi todo su plantel, salvo por las bajas obligadas de Elías Montiel y Alexéi Domínguez, además de la ausencia del único tuzo convocado a fecha FIFA: Enner Valencia.
Aunque se trate de una celebración, el duelo tiene un valor estratégico para Pachuca. Será la única prueba antes del decisivo play-in frente a Pumas del próximo 20 de noviembre, un choque que podría definir el rumbo competitivo del semestre.
La visita al Morazán también se suma a la particular tradición tuza de formar parte de aniversarios históricos en el continente, como ocurrió ante Boca Juniors en 2005, Chivas en 2006, Talleres en 2013 y Barcelona de Guayaquil en 2025.
Para Marathón, el encuentro tendrá un matiz emocional adicional: el homenaje a Mario René Berríos, leyenda verdolaga que volverá a pisar la cancha unos minutos para honrar su legado. El plantel de Pablo Lavallén también enfrentará ausencias, como las de Alexy Vega y César Samudio.
En una noche que combina celebración y análisis, Solari buscará dejar sus primeras señales futbolísticas, consciente de que cada minuto servirá para acercar al Pachuca a la versión competitiva que exige su historia.
