Miguel Á. Martínez. Tula de Allende. A través de un comunicado, grupos ambientalistas con presencia en la Ciudad de los Atlantes y su región de influencia condenaron la insistencia de los tres órdenes de gobierno por llevar a cabo el revestimiento del río Tula, que se frenó el 15 de noviembre de 2017 ante la oposición ciudadana.
Por medio de un escrito, la Red de Consciencia Ambiental Queremos Vivir y el Grupo Ecologista Hidalguense, lamentaron que luego de cuatro años, los distintos órdenes de gobierno no hayan entendido que encementar y matar el río no es la solución a las inundaciones que se viven en temporada de lluvias en la antigua Capital Tolteca.
Los activistas refieren que la obra que quieren imponer las autoridades sólo es una salida fácil para no asumir su verdadera responsabilidad frente a la problemática de contaminación y destrucción ecológica que ha sufrido la región de Tula durante los últimos 60 años.
Expresan que, de acuerdo con expertos en la materia, tanto nacionales, como internacionales, la solución al tema de inundaciones en el Valle del Mezquital y más allá de sus fronteras está en el tratamiento de las aguas residuales que se da a los líquidos residuales en la Cuenca del Valle de México.
Cuestionan el por qué los ciudadanos de Hidalgo deben seguir siendo la fosa séptica a cielo abierto de la Ciudad (CDMX) y Estado de México.
Finalmente, rechazan tajantemente la cobardía de los tres órdenes gubernamentales por haber tenido una mesa de trabajo para tratar los temas del río y de las inundaciones del pasado septiembre y no haber avisado a la sociedad afectada.