Alberto Witvrun.-La pausa de fin de año en todas las actividades incluyendo la política, era necesaria al Partido Revolucionario Institucional (PRI), porque las señales de que caminan a una candidatura de unidad son insuficientes incluso, la fotografía que subieron a sus respectivas redes Carolina Viggiano Austria e Israel Félix Soto, no terminaron con las suspicacias de que no se consolida la unidad.
Sirvieron los días de agitación en Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que finalmente resolvió su proceso interno que manoseado y desaseado provocó rupturas y no les será fácil reconstruir los tejidos dañados, porque los 50 aspirantes que se inscribieron querrán ser considerados, mientras que Francisco Xavier Berganza Escorza, está buscando la candidatura independiente.
Pero la distracción terminó, ahora la atención está en el PRI, donde en militancia y estructuras sigue la percepción de que la unidad no se alcanza, incluso hay personajes como Roberto Pedraza Martínez, que abonan a la división al asegurar que de no ser Israel Félix el postulado, lo ve fuera del PRI, a pesar de los llamados de las dirigencias nacional, estatal y del propio gobernador del estado.
La cuenta regresiva empezará el 10 de enero del 2022, y la tensión crece porque el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) insiste en atraer el proceso, el tiempo se agota para quienes tomarán la decisión, cualquiera que sea, tendrá que ser con unidad, real, sin simulación, no se pueden dar el lujo de fingir, de simular, porque el riesgo de que pierdan es real, la oportunidad de retener el gobierno es que verdaderamente vayan juntos.
Porqué no será fácil convencer a los simpatizantes y estructuras de ambos aspirantes paraque se sumen al trabajo partidista después de tanta tensión, lo que no es imposible siempre que no haya simulaciones ni vendettas internas, por lo pronto tienen un espacio para la reflexión.