Miguel Á. Martínez. Tula de Allende. Una vez que se reinstale la energía eléctrica por parte de la Comisión Federal de Electricidad y la fábrica cementera La Cruz Azul, planta Hidalgo pueda reanudar producción y por consiguiente generar ganancias para la empresa nuevamente, se habrán de pagar los sueldos caídos de cuatro quincenas que llevan mil 500 trabajadores sin cobrar hasta el momento.
En estos términos se expresó Federico Sarabia Pozo, uno de los dos presidentes del Consejo de Administración del núcleo, presuntamente afín a la causa del exdirector general de la Cooperativa, Guillermo Álvarez Cuevas, quien, se encuentra prófugo de la justicia desde julio de 2020.
En entrevista, el encargado de los destinos de la fábrica de cementos asentada en Hidalgo, dijo que: “necesariamente se tendrán que reponer los sueldos caídos de más de 2 meses sin salario que han tenido que sortear los mil 500 empleados del núcleo… es lo justo”.
Sarabia Pozo sostuvo que, para tal efecto, se tendrá que diseñar un esquema financiero para poder devolver lo que han dejado de cobrar los obreros, quienes son los menos culpables de lo que sucede.
“Tendremos que platicar con nuestros trabajadores, llegar a un acuerdo… quizá les digamos que una quincena se las pagamos doble y luego nos dejen descansar, para recapitalizarnos y que para el siguiente mes les pagamos otra de las que les debemos, no sé, sería cuestión de dialogarlo”.
El presidente del Consejo de Administración, reconoció que la falta de recursos que derivó el corte de energía que les hicieron el pasado 17 de agosto, los ha llevado a una de las peores crisis que ha tenido la Cooperativa, la cual, “gracias a Dios” están librando gracias al apoyo de los empleados y de la sociedad en general, que, por ejemplo, ha estado donando despensas para quienes más lo necesitan.