Alberto Witvrun.-La mayoritaria fracción de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en la 64 Legislatura local decidió enviar a la congeladora la iniciativa de ley que contempla la Interrupción Legal del Embarazo con el pretexto de la polarización entre la Ola Azul y la Marea Verde, pero en realidad hay un trasfondo político en la víspera del proceso electoral para renovar los 84 ayuntamientos de Hidalgo.
Diputados identificados con el Corporativo Grupo Sosa, estaban entrampados entre los acuerdos adoptados en el Centro de Extensión Universitaria por su jefe político Gerardo Sosa Castelán con integrantes del colectivo Marea Verde, luego de que su pupilo el diputado por Tepeapulco Jorge Mayorga Olvera, se atrevió a comparar el aborto legal con las corridas de toros, que ocasionó incluso que se pidiera su expulsión de Morena y sus compromisos con la Iglesia Católica.
Marco Antonio Hernández Vera legislador por Tulancingo que aspira a que con el apoyo de su jefe sea postulado a presidente municipal, se tronaba los dedos debido a su cercanía con la jerarquía del arzobispado y lo que parecía la inminente aprobación de la ley, ponía seriamente en riesgo sus relaciones, aun cuando se abstuviera o votara en contra; lo mismo que para la diputada por Ixmiquilpan Lucero Cruz Ambrosio.
Así que Morena, que celebró foros, conferencias y enarboló como bandera la Ley para la Interrupción Legal del Embarazo, reculó por el temor fundado de un efecto negativo en las urnas electorales, ya vimos la movilización de la Ola Azul, ajora esperemos la reacción de la Marea Verde y el costo que pagará particularmente con estos grupos Gerardo Sosa, que algo ofreció en esa reunión privada, que frenó las críticas a su pupilo, Jorge Mayorga.