Alberto Witvrun.-El diputado federal Cipriano Charrez Pedraza, ya siente presión al serle cancelados sus derechos partidistas por un año, quedar fuera de la fracción parlamentaria de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y no poder ejercer cargo alguno en el partido, además en el Valle del Mezquital se asegura que el chofer al que responsabiliza del accidente del 6 de octubre, no quiere echarse la culpa y dejó de prestar sus servicios al ex alcalde de Ixmiquilpan.
Ahora se sabe que fue una faramalla, su ingreso una solicitud de licencia porque fue del 19 al 27 de marzo, misma que no ha sido discutida en San Lázaro, por tanto mantiene el fuero constitucional y no puede ser detenido o presentado por la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH), con lo que buscó anular el juicio de procedencia (desafuero) e intentar ponerle un garlito a las autoridades para que cayeran en fallas al debido proceso, si hubieran actuado en su contra.
Charrez Pedraza, quien de joven tuvo un paso fugaz por el Consejo Supremo Hañahñu (CSH) aparece en la escena política del Valle del Mezquital junto con sus hermanos Pascual y Vicente, durante el gobierno de Vicente Fox, apadrinados por Xóchitl Gálvez Ruiz encabezando organizaciones sociales que les permitieron bajar recursos federales para proyectos productivos, paralelamente extorsionaban a empresas constructoras para dejarlas trabajar, tras casi dos décadas de carrera política, está en una encrucijada.
Sin la protección de Morena y al no haberle cuajado su jugarreta de solicitar licencia solo por nueve días, aún está sujeto al dictamen de la Comisión Dictaminadora que conoce del juicio de procedencia en su contra, proceso que sigue al no serle aprobada la licencia, así que la PGJEH actuó con prudencia y discreción en espera de la respuesta a su solicitud de desafuero para poder proceder, mientras tanto y aunque continúa con fuero, parece entró a un callejón sin salida, más si se confirma que su chofer se le rajó.