Alberto Witvrun.-En las últimas horas en algunos sectores de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) se preguntan porque las protestas en contra de la posible postulación de Canek Vázquez Góngora como candidato a presidente municipal de Pachuca en la visita de Yeidkol Polevnsky y no en la de Alfonso Ramírez Cuéllar, en lo que se asoma como el inicio de una guerra sin cuartel.
La respuesta es simple, porque en el conflicto interno por la dirigencia nacional morenista, el Instituto Nacional Electoral (INE), tiene 20 días para dar una respuesta y este periodo vence el 5 de marzo, cuando prácticamente estarán definidas las candidaturas a los 84 ayuntamientos de Hidalgo y a las diputaciones locales de Coahuila y buscaron influir en el ánimo de la secretaria general con funciones de presidenta.
Lo interesante del rechazo a la viable candidatura de Vázquez Góngora, es de quien es la mano que meció la cuna, porque quienes se manifestaron para muchos, es la primera vez que hicieron su aparición en un evento de Morena, incluso los que repartieron volantes y colocaron un par de lonas, intentaron hacer creer que son simpatizantes del senador suplente Navor Rojas Mancera, lo que es totalmente falso.
Así que hay fuego amigo y el asomó de una contra campaña de ser postulado Canek Vázquez, por algún personaje que ve afectado su futuro político, y no falta quien piense que es una vieja estrategia de Gerardo Sosa Castelán, de tirar la piedra y esconder la mano, que sigue pensando que alguno de sus leales puede ser postulado a la Casa Rule.
Tampoco se puede descartar que le haya organizado su show al ex diputado local y federal alguna mano externa, como sea esto habla de que no será tersa la postulación de candidatos a presidentes municipales en Morena y que hay una encarnizada lucha intestina por las candidaturas, ante la falta de liderazgos y una dirigencia formal y legal que de institucionalidad y convierta este movimiento en partido político.