Miguel Á. Martínez. Tula de Allende. El gobierno local y los nueve que estaban integrados al proyecto del Centro Regional de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos de Atitalaquia (CRTRSU), siguen a la deriva por falta de un espacio “seguro” y que cumpla con la normativa ambiental para el depósito de basura.
Lo anterior fue revelado en mesa de trabajo por el alcalde Manuel Hernández Badillo, quien en el marco de esa reunión dijo que por el cambio de gobierno estatal han tenido que, tanto Tula como el resto de las demarcaciones, han tenido que dejar el tema de lado, pues están conscientes de que no se solucionará en los días que le restan a la administración de Omar Fayad Meneses.
Detalló que, ante la imposibilidad de depositar sus residuos en el complejo de tratamiento de Atitalaquia, y más aún con su clausura definitiva, a partir del 22 de julio pasado, las localidades de la zona quedaron sin una alternativa avalada por la legislación ambiental, por lo cual, se está transfiriendo la basura hacia tiraderos del Estado de México, servicio prestado por la empresa Tecnosilicatos.
El edil, explicó ante integrantes de la Asamblea municipal, que, temporalmente se está utilizando como centro de transferencia al antiguo relleno sanitario de Tula, mismo que clausuró la Secretaría del Medio Ambiente estatal (Semarnath), desde el 19 de marzo de 2019. Dijo que la dependencia les había dado esa alternativa emergente.
Externó que se encuentran a la espera de que se tome una determinación de manera coordinada con los municipios de la región y el próximo gobierno del estado, para saber de una vez por todas qué se va a hacer en este caso.