Alberto Witvrun.- Con fecha 31 de marzo las 501 unidades médicas del Sistema de Salud de Hidalgo pasaron a manos del IMSS Bienestar, incluyendo los hospitales de Actopan, Tula de Allende, Zacualtipán y el General de Pachuca convertidos en Elefantes Blancos de millonarias inversiones en el gobierno de Omar Fayad Meneses, que presentan fallas técnicas y estructurales, a pesar de ello el ex secretario de Obra Públicas José Ventura Meneses Arrieta sigue sin ser llamado a cuentas.
Como muestra un botón: Constructora AIRAM JM S. A. de C. V. realizó trabajos por 98 millones de pesos en el Hospital General que hoy requiere de una inversión de 50 millones de pesos para su adecuada operación y la persona física CVP, construyó el distribuidor vial Venta Prieta con un costo de 180 millones 278 mil 258 pesos, a pesar de que le demolieron una obra en el CBTis 222 por no cumplir normas estructurales entre 2009 y 2010 y ambas empresa están ligadas a Meneses Arrieta; porque la segunda es un familiar.
Es claro que el ex gobernador hoy embajador de México en Noruega, tenga impunidad por diversos motivos, uno de ellos su cordial relación con el ex presidente Andrés Manuel López Obrador, que dio a partir del Martes Negro cuando se incendió una toma clandestina en San Primitivo, Tlahuelilpan que dejó una estela de muerte y como gobernador Omar Fayad, “absorbió” el costo político, que hubiera sido peligroso para el entonces incipiente gobierno federal de la transformación.
Por lo pronto el gobierno federal a través de IMSS Bienestar realiza millonaria inversión en los policlínicos y es responsabilidad de esta instancia reportar las condiciones en que recibieron los inmuebles, de no hacerlo la impunidad será para empresas y funcionarios que se beneficiaron con estas obras que no cumplen con los objetivos para los que fueron proyectados y construidos; por lo pronto parece que la protección de que goza el embajador, alcanza para su primo, mientras el IMSS Bienestar revive la infraestructura que agonizaba.
