Alberto Witvrun.-Aún no superada la investigación sobre posibles actos de corrupción que la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHyCP) le sigue a la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) y en respuesta al pronunciamiento del presidente Andrés Manuel López Obrador de ir en contra de los caciques que controlan a instituciones públicas de educación superior, Gerardo Sosa Castelán, insiste en su proyecto: ser candidato a gobernador.
Es más de conseguir su objetivo en 2020, arma su plan B por si Movimiento de Regeneración independiente con base en la estructura que pretende crear a partir de apoderarse del mayor número de ayuntamientos posible, estructura en la soportaría una campaña que le daría posibilidades de hacer realidad su obsesión.
Para ello ha convertido a la UAEH en un partido político y a la Fundación Hidalguense en su brazo electoral y a los campus universitarios en centros de operación regionales, todo obviamente operando con recursos destinados a la educación, porque sus “operadores” están obligados a realizar tareas proselitistas a cambio de conservar su empleo sean académicos o empleados administrativos.
El plan está en marcha, lo primero fue seleccionar al interior de la UAEH potenciales aspirantes a presidentes municipales, quienes con apoyo logístico universitario ya se encuentra efectuando reuniones primero con grupos cercanos que empiezan a extenderse involucrando a la comunidad estudiantil, porque Gerardo Sosa quiere que sea el mayor número, porque los ayuntamientos de los que logre apoderarse serán su plataforma.
El argumento es claro, Morena no tiene estructura ellos, sí y, si logran llevar presidentes municipales en una treintena de municipios incluyendo Pachuca y Tulancingo, en 2022 podrá presionar a la dirigencia nacional o bien prescindir de este partido como lo hizo en su momento de Acción Nacional (PAN) y de Movimiento Ciudadano, por lo pronto no abandona la lucha formal e impulsa a su hermano Damián Sosa como aspirante a dirigir Morena.
Igual se da tiempo para a través de sus diputados tratar de generar leyes que favorezcan a su proyecto como el Artículo 35 de la reforma al Código Electoral o “Ley Mordaza” y de sabotear las actividades del senador Julio Menchaca Salazar o ahora más discreta realizar una campaña de tierra en contra del secretario de Hacienda Arturo Herrera Gutiérrez a quien insiste en ubicar como e incumple el principio de tregua con el gobierno estatal.
Habrá que esperar si su estrategia le funciona y la Comisión Nacional de Elecciones de Morena, que será la que definirá candidaturas no los grupos locales y menos la base militante y simpatizantes, dejan pasar a los candidatos del Corporativo Grupo Sosa o atiende el llamado del presidente Andrés Manuel López Obrador de combatir a los caciques y grupo que operan como sindicatos del crimen, para controlar universidades públicas, él dijo.