Alberto Witvrun.- En 1987 el rector de la Universidad Autónoma de Hidalgo (UAH) Juan Manuel Menes
Llaguno pidió al gobernador Adolfo Lugo Verduzco, considerara candidaturas a presidente
municipal para los universitarios; la respuesta fue contundente: que para que eso
sucediera la universidad tendría que declararse públicamente priista.
El grupo universitario tenía en su poder 15 ayuntamientos y dos diputados locales: Jaime
Rivas y Sabás Salinas, a través del PRI por el que Gerardo Sosa había sido diputado local
gracias a Jorge Rojo; el de Acaxochitlán rompió lanzas, aunque el reto se había lanzado
con la campaña Hidalgo para los Hidalguenses reprobando a Ernesto Gil como secretario
de Gobierno.
Meses de tensión y cuando parecía que las relaciones mejorarían al ser invitado Lugo
Verduzco al informe de Menes Llaguno, vino el reto; el recorrido del gobernador fue
vigilado por porros armados de la Federación de Estudiantes Universitarios de Hidalgo
(FEUH) que portaban un brazalete con los colores azul y oro.
Adolfo Lugo, actuó con mesura, ante la “seguridad” de la UAH, bajo el argumento de la
autonomía; el colofón fue, tras la amenaza de ir a la cárcel por proteger a la banda de El
Edy en la Huasteca, Gerardo Sosa, se auto exilio en Boston en 1990 para no intervenir en
la selección de candidatos a alcaldes del PRI.
El ritual se mantiene, las formas no, pero siempre con actitudes retadoras, así visitaron los
campus Jesús Murillo, Manuel Ángel Núñez, Miguel Ángel Osorio, Francisco Olvera y Omar
Fayad, a todos ellos ha sobrevivido el clan, que ya no recibe ordenes desde Amaque hoy
salen de Valle de Cáceres en San Javier.
Obediente, Octavio Castillo invitó al gobernador Julio Menchaca, recorrieron
instalaciones, destacó logros y quien en breve será ungido como rector por un periodo
completo acusó al anterior gobierno de intentar vulnerar la autonomía, la que ellos no
respetan al utilizar la institución con fines políticos.
También criticó el bloqueo de sus cuentas por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de
Santiago Nieto, mientras, el clan se prepara para ir por el mayor número de candidaturas
ahora por Morena y de no lograr sus objetivos políticos envueltos en la bandera de la
autonomía, no se descarte un nuevo desafío, el aviso es circular la versión de que Gerardo
Sosa será liberado e irá por su añorada candidatura al Senado, eso sí el ritual se cumplió.
