Arturo G. Alanis. Ixmiquilpan.- Luego de la renuncia de los ocho diputados locales y secretarios del Comité Directivo Estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el dirigente municipal del mismo instituto partidista, Enrique Simón Romero, hasta entonces no tenía considerado sumarse a esa desbandada, ocurrida la mañana del martes 20.
A pregunta expresa de Diario Vía Libre, Enrique Simón respondió de manera escueta que “hasta este momento nadie ha hablado conmigo para explicarme por qué sería una buena idea hacerlo (renunciar a la militancia del PRI)”, pero aseguró que de tomar alguna decisión al respecto no tendría por qué ocultarlo y lo haría del conocimiento público.
En medio de esa situación, no se sabía el destino político del operador político del PRI en la región Ixmiquilpan, Erick Alonso Cruz Becerra, señalado de no pagar compromisos durante la última campaña para la gubernatura, así como de dividir a la militancia al ignorar a destacados cuadros tricolores ixmiquilpenses, que por esa razón prefirieron apoyar al entonces candidato del Morena, actual gobernador.
Inclusive, de las últimas veces que se le vio a Erick Alonso Cruz en Ixmiquilpan, fue desde el lunes 1 de mayo pasado, durante el minimizado Encuentro Anual del Pueblo Hñahñu, particularmente acompañando a su aliado político y amigo Roberto Pedraza Martínez, también señalado de contribuir para que el PRI perdiera la gubernatura.
Entre tanto, sigue en estado de cuasi abandono la sede del PRI municipal de Ixmiquilpan, donde rara ocasión acude Enrique Simón, lo mismo que Erick Cruz, no obstante que prometieron permanente cercanía con la militancia con o sin temporadas electorales, “para recuperar la credibilidad y fortalecer al partido”.