Jocelyn Andrade.- El legislador federal panista Asael Hernández Cerón afirmó que la revocación de mandato en Hidalgo constituye un gasto innecesario, asegurando que el actual gobernador fue electo por un periodo de seis años y no existe obligación de someter su continuidad a consulta.
Consideró que impulsar dicho ejercicio podría interpretarse como un acto de soberbia política, pues no existe obligación y solo representa un gasto y reiteró su deseo de que al Ejecutivo estatal le vaya bien, porque si obtiene resultados positivos la población hidalguense recibe beneficios.
Enfatizó que las decisiones deben orientarse hacia proyectos que fortalezcan áreas de necesidad en la entidad, y el recurso, destinarse a proyectos en beneficio de la población.
En el mismo tema, la presidenta estatal del Partido Acción Nacional (PAN) Marcela Isidro García coincidió en que destinar 14 millones de pesos a la revocación de mandato no responde a las prioridades sociales.
Explicó que esos recursos se aprovecharían mejor en rubros de salud o seguridad, donde existen demandas constantes, además que el procedimiento corresponde más a una estrategia de propaganda política que a un mecanismo útil para la ciudadanía.
Cuestionó que si se pregunta a la población si resulta preferible destinar los recursos a la construcción de calles o emplearlos en lo que definió como un ejercicio de simulación, la respuesta sería que mejoren las vialidades.
