Ángel Bautista. Huejutla de Reyes.- La paciencia de los habitantes de Chiconamel, Veracruz llegó a su límite; retuvieron y trasladaron por la fuerza a un trabajador de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de Huejutla de Reyes. El motivo: la desesperación ante las constantes y prolongadas fallas en el servicio eléctrico.
El empleado de la CFE fue llevado directamente al punto donde la comunidad exige que se repare la avería, medida drástica que refleja la creciente frustración de los usuarios. Este incidente se suma a una serie de problemas que afectan de manera recurrente a Huejutla y sus alrededores.
La Huasteca hidalguense y la veracruzana han experimentado temperaturas extremas en los últimos meses, con el termómetro superando constantemente los 40 grados Celsius. Estas condiciones climáticas, sumadas a una infraestructura eléctrica que a menudo se percibe como deficiente, provocan sobrecargas y apagones que afectan la vida diaria, el comercio y, en algunos casos, la salud de las personas, especialmente de los más vulnerables.
Aunque los trabajadores de la CFE en campo suelen ser el primer contacto para los usuarios, y a menudo no son los responsables directos de las fallas sistémicas, se convierten en el blanco de la indignación popular. Esta situación en Chiconamel es un claro llamado a las autoridades y a la empresa para que tomen medidas urgentes y definitivas a fin de modernizar la red eléctrica y garantizar un servicio confiable a la población.
La comunidad exige soluciones duraderas para evitar que este tipo de hechos se repitan.