Arturo G. Alanís. Ixmiquilpan.- Comerciantes establecidos reprobaron el desalojo que sufrieron vendedoras semifijas de verdura, conocidas como chantitas, en su mayoría mujeres de avanzada edad, que se instalaban en la calle Jesús del Rosal del barrio San Antonio, en cercanías del centro de la cabecera.
La propietaria de una cocina económica de las cercanías, identificada como Teresa Monter Lugo, dijo haber presenciado la forma en que «por órdenes del presidente municipal, Emanuel (Hernández Pascual)», retiraron a todas las marchantas que vienen de la parte alta del Valle del Mezquital.
En video difundido en redes sociales, catalogó la acción como «muy triste y muy lamentable», argumentando que ese grupo de mujeres viene de lejos para llevar el sustento a sus familias, pero ya no pudieron vender sus productos «por órdenes del ciudadano presidente»; de ahí, emitió un llamado para que a las chantitas les permitan reinstalarse en aquella calle.
Ante esa controversia, autoridades de la alcaldía trataron de desmentir a la locataria Teresa Monter, señalando que «las afirmaciones vertidas en dicho video son falsas», a la par de aseverar que Emanuel Hernández «no ha emitido instrucción alguna relacionada con el hecho mencionado».
Y del desalojo responsabilizaron a las autoridades de la Delegación del barrio de San Antonio, señalando que «decidió acordonar el área debido al alto tránsito vehicular en la zona, con el objetivo de prevenir riesgos para la ciudadanía», además de asegurar que las chantitas «cuentan con alternativas y espacios seguros para ejercer su actividad comercial».