Laura Elizabeth Trejo.- Las políticas prohibicionistas relacionadas con el consumo de drogas están equivocadas y han provocado crisis de violencia en México, señaló Cuauhtémoc Granados Díaz, jefe del Área Académica de Derecho y Jurisprudencia del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades (ICSHu) de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).
“El día en que se legalicen las drogas van a dejar de formar parte de un mercado negro que genera grandes ganancias y disminuirán los grupos criminales que se están peleando plazas, porque disputan un negocio”, expuso.
En este contexto, el investigador habló del Reglamento Federal de Toxicomanías, el cual se publicó en el 17 de febrero de 1940 en el Diario Oficial y facultaba al entonces Departamento de Salubridad Pública la autorización a dispensarios, hospitales, así como a las y los médicos, tanto públicos como privados del país, a prescribir narcóticos, enervantes y psicotrópicos bajo supervisión médica.
De acuerdo con el especialista, dicho reglamento representó un gran adelanto en cuanto a la legalización de las drogas, al considerar las adicciones como un problema de salud pública en lugar de un delito.
“Sin embargo, el conservadurismo de la sociedad mexicana junto con el movimiento prohibicionista y la presión del gobierno de Estados Unidos de América, en particular la incidencia de Harry J. Anslinger, primer comisionado del Buró Federal de Narcóticos, desembocó en su0 suspensión a 5 meses de entrar en vigor”, recalcó.
Entonces, abundó, la visión del gobierno Lázaro Cárdenas permitía que las personas adictas recibieran pequeñas dosis controladas y supervisadas por los servicios de salud, monopolizando la venta y estableciendo precios accesibles, lo que provocó pérdidas en el mercado negro de estupefacientes.
Asimismo, el producto poseía buenos estándares de calidad o sin aditivos, lo que permitió disminuir las muertes.
Con respecto al posicionamiento de algunos políticos estadounidenses sobre el tráfico de drogas en México, sobre todo el problema del fentanilo, Granados Díaz enfatizó que los señalamientos hacia el país caen en la satanización, ya que sin el alto consumo en Estados Unidos no habría producción.
“Se produce porque ellos la consumen, sino la consumieran no se produciría, no es que se produzca al 100 por ciento en México, se puede producir en todos los países porque la van a vender a un país altamente consumista”, indicó.