Miguel Á. Martínez. Tula de Allende.- Al menos 300 habitantes de Cruz Azul se manifestaron en la presidencia municipal en demanda de seguridad y señalaron la omisión del presidente Manuel Hernández Badillo quien no atiende la problemática que se padece el municipio y principalmente en aquel sector.
Los manifestantes portan pancartas con mensajes como “Tula hundida en la corrupción”, “Queremos seguridad”, “Queremos vivir en paz”, “Queremos de regreso el IMSS”.
Reprocharon que en la feria de San José 2023 se gastaron más de 7.4 millones de pesos, mientras que la seguridad está abandonada, lo mismo que desmantelada la Secretaría de Seguridad Pública local (SSP). Exigieron la liberación de tránsito en alusión al bloqueo permanente que mantienen tomada la planta de La Cruz Azul.
Tras unos minutos de manifestación salió de la alcaldía el secretario general Jhordan Lara Cervantes, intentó dialogar pero ante la falta de soluciones, los inconformes optaron por bloquear los puentes Metlac y Melchor Ocampo, donde permanecieron por unos 25 minutos para después dirigirse al centro de la ciudad.
Recorrieron las cuatro avenidas del primer cuadro de la ciudad para después salir por avenida Zaragoza y Leandro Valle, de vuelta a la presidencia municipal, donde obligaron a las autoridades locales a firmar una serie de compromisos para brindar seguridad y garantizar el desbloqueo de calles en Cruz Azul.
Además del clima de inseguridad y violencia en todas las latitudes del municipio, la semana pasada el panorama recrudeció en la zona sur de la demarcación, correspondiente a la comunidad de Cruz Azul y sus ocho localidades, debido a la presencia de grupos de la delincuencia organizada, balaceras y robos de vehículos con violencia.
La protesta se fundó por más de dos años de omisiones de la autoridad municipal a la problemática de inseguridad que priva en aquel sector, por la disputa entre dos grupos de la empresa cementera La Cruz Azul.
Además de mayor seguridad como demanda principal, los manifestantes exigieron que las calles y avenidas de Cruz Azul sean desbloqueadas por el ayuntamiento, luego de más de dos años de estar “secuestradas” por los llamados Alvaristas, que mantienen en su poder la planta de cementos La Cruz Azul, asentada en Jasso.