Miguel Á. Martínez. Tepeji del Río.- Ante la grave situación que se vive en la presa Requena, a consecuencia de los bajos niveles del embalse, la enorme tasa de mortalidad de peces (de 100 por ciento, de acuerdo con pescadores) y las pérdidas económicas para pescadores del cuerpo de agua, el gobierno de Salvador Jiménez Calzadilla ingresó una solicitud de declaratoria de emergencia al estado y la federación.
En entrevista, a pie del represo, donde el presidente trabaja desde este jueves junto con funcionarios de la administración local en labores de saneamiento y retiro de peces muertos, el edil detalló que la petición se llevó ayer al estado, mientras que este viernes, personal del organismo operador del vital líquido local (CAAMTROH) lo ingresó a la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Salvador Jiménez consideró que la petitoria está bien fundada, por el escenario catastrófico que se vive en La Requena y el municipio mismo por la falta de agua en el embalse, la mortandad de ejemplares y las pérdidas económicas para un sector vital en la economía del municipio, como los pescadores.
Por lo anterior, dijo, las autoridades superiores deben voltear a ver a Tepeji, no sólo por el escenario que atraviesa, sino también porque la presa necesita un desazolve urgente, ya que su capacidad se ve reducida a menos del 50 por ciento, derivado de la acumulación histórica de sedimentos.
Por separado, integrantes de la asociación de pescadores de la presa Requena 20 Arcos, estimaron que hasta hoy se han perdido al menos 13 toneladas de producto, lo que en suma representa, mermas económicas por más de 250 millones de pesos.
Tan sólo, indicaron que ayer se sacaron del embalse más de 10 toneladas de peces muertos, que se suman a las 2 y media toneladas que se derramaron la tarde del martes hacia canales de agua negras del Valle del Mezquital y las toneladas que aún se retirarán este viernes, como en días subsecuentes.
Jiménez Calzadilla llamó a la población a no comprar ni consumir peces que fueron recolectados muertos en los canales de riego de municipios como Tula, Tezontepec y Mixquiahuala, pues aunque en un origen procedían de La Requena, al estar en contacto con aguas negras, ya no son aptos para ingerirse como alimento.