Alberto Witvrun.-Quien crea que la crisis en la fracción parlamentaria de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) terminó luego de aprobarse el paquete económico 2020 y el paréntesis de las fiestas de fin de año, simplemente está equivocado, porque se acerca la lucha por las candidaturas a presidentes municipales, cuyo proceso constitucional inició en la tercera semana de diciembre.
Tan luego la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de a conocer el resultado del procedimiento de oficio en contra de los 10 legisladores que con su voto en contra y abstenciones evitaron la aprobación de la Interrupción Legal del Embarazo (ILE), que están plenamente identificados con el grupo del jefe absoluto de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), estos se lanzarán en contra del Grupo de Los 7.
Si los siete que ya no reconocen como su coordinador a Ricardo Baptista González y a quienes acusan de haberse entregado a los brazos del responsable de la política interior Simón Vargas Aguilar de quien asegura el club legislativo universitario que se ha encargado de “untarle” la mano a sus no tan compañeros de bancada para hacerle juego a las estrategias políticas del gobernador Omar Fayad Meneses.
Lo que reina entonces en la fracción parlamentaria morenista de la 64 Legislatura es la confusión o bien es la versión política del filme noventero Durmiendo con el Enemigo, donde una esposa maltratada finge su muerte para huir de su maltratador esposo, este al descubrirla quiere matarla, pero al final ella es quien le quita la vida mediante tres disparos de arma de fuego.
Así veremos que varios de los diputados que no aceptan la jefatura de Gerardo Sosa Castelán, tal vez opten por disputar una candidatura a presidente municipal y sumen fuerzas con otras tribus (porque las hay) para confrontar abiertamente al Corporativo Universitario Grupo Sosa, sin que se defina quienes son los buenos y quienes son los malos o caso los malos hoy son los buenos o los buenos se volvieron malos.
Así en medio de la confusión e incertidumbre institucional camina Morena a su primera contienda electoral constitucional en forma, donde lo único que le favorece realmente es la inercia de 2018, pero estas pugnas intestinas y la falta de una dirigencia formal que ponga orden, pueden hacerle mucho daño en las urnas electorales para renovar los 84 ayuntamientos.