Miguel Á. Martínez. Tula de Allende. El dictamen respecto a la problemática de operación de una antena de telefonía celular en la comunidad de Pueblo Nuevo, Tula se resolvió a favor de los ciudadanos que se oponen a su funcionamiento, por lo que el artefacto debería ser sacado de operación en las próximas semanas reveló la regidora Araceli Rivera Díaz.
En entrevista, la edila, adelantó que, el veredicto de la Asamblea municipal será votado en una sesión extraordinaria que tendrá verificativo el martes o miércoles de la próxima semana, dado que es urgente resolver el asunto antes de que derive en un encono social de grandes dimensiones.
Celebró que, al menos el fallo del ayuntamiento fue favorable a la causa ciudadana, pero aclaró que no será un triunfo hasta que la mayoría de integrantes del colegiado no voten a favor de revocar la licencia de funcionamiento de la repetidora de señal.
Cabe recordar que, desde hace más de mes y medio, pobladores de la localidad en comento se encuentran en contra de la operación del dispositivo tecnológico, refieren que el armatoste, que ya se encuentra en funciones desde principios de año, puede dañar la salud pública, por producir ondas radioactivas derivado de su actividad.
En otro sentido, la asambleísta señaló que la cancelación del permiso para la operación del aparato podría traer consecuencias legales para el municipio, porque este, a través de la directora de Obras, Kathia Miranda Tolentino, aprobó la licencia para la construcción y colocación del mecanismo, como para que, de buenas a primeras, ya habiendo hecho la inversión, se les cancele el permiso.
Previó que, por las consecuencias legales que el tema pueda traer al ayuntamiento, también la directiva tendría que ser sancionada: “en el dictamen se le pide al alcalde que la Contraloría interna se investigue el caso y se sancione por haber otorgado una licencia sin que se cumpliera con todos los requisitos necesarios para tal efecto”.
Este fin de semana, integrantes de la Gran Asamblea de Damnificados Tula 2021, entregaron un total de 19 despensas a boleros cuyos carros de trabajo se encuentran ubicados tanto en el jardín municipal, como a un costado de los juzgados en materia civil de la demarcación, los cuales resultaron afectados por las inundaciones del pasado septiembre.
En su conjunto los trabajadores del aseo de calzado dijeron ser un sector que ha sido olvidado y marginado por autoridades de los tres órdenes de gobierno.
Uno de los beneficiarios, que no se identificó por temor a represalias, dijo que, tras seis meses de la anegación, las autoridades sólo les han entregado dos despensas como apoyo, pese a la gran necesidad económica y alimentaria que tienen.
Otro de los boleros, lamentó que, los tres órdenes de gobierno les hayan dado la espalda, puesto que, afirmó que en las elecciones en que los políticos resultaron electos, ellos les dieron su apoyo y confianza al sufragar por ellos, por lo que no es justo que hoy le den la espalda al gremio.
En su participación, la presidenta de la Gran Asamblea, María Berenice Pecina Jiménez, señaló que la entrega se realizó pues se hizo una petición directa a la organización que lidera por parte de los boleros, quienes aseguraron que no han recibido más que un apoyo muy pobre del gobierno, por lo que, se determinó solidarizarse con la necesidad del grupo vulnerable.
Explicó que, las despensas entregadas se lograron integrar gracias a los apoyos alimentarios que ellos también recibieron en exceso pocos días después de la anegación, por lo que se conjuntaron los abarrotes y los repartieron entre las personas que más lo necesitan.