Oliver García.- El ayuntamiento de Pachuca emitió los lineamientos para la enajenación de bienes en desuso propiedad del municipio, que prohíbe la venta y donación en los casos en que haya participación de servidores públicos, su cónyuge, así como parientes civiles y consanguíneos.
También limita a terceros con quienes los servidores públicos del ayuntamiento tengan relaciones profesionales, laborales o de negocios o para socios o sociedades de las que el funcionario o las personas referidas formen parte, dice el documento publicado en el Periódico Oficial de Hidalgo (POEH).
Sólo en “casos excepcionales” y con debida justificación de parte de la Comisión Intersecretarial de la Administración Pública –órgano responsable de estos procedimientos–, estos podrán ser donados o asignados a institutos o asociaciones de la capital, con fines educativos o de asistencia social.
Podrá vender aquellos en calidad de inservibles o desuso, mediante subaste, remate e invitación a cuando menos tres compradores, o por adjudicación directa.
El gobierno local está facultado para mantener en reserva el precio base de venta hasta el acto de presentación de las ofertas de compra, en aquellos casos en que se considere que este mecanismo coadyuvará a estimular la competitividad entre los interesados y a maximizar el precio de venta, dice.