Guillermo Bello.- Necesario que los médicos de la entidad se capaciten para reconocer padecimientos en niños, ya que la falta de experiencia puede provocar diagnósticos erróneos que podrían provocar incluso la muerte de las personas, señaló la señora Juana González.
Juana González es madre Max, un joven a quien hace 14 años le diagnosticaron Autismo, y señaló que si bien en ese entonces no había la suficiente información respecto a este padecimiento, una de las primeras respuestas por parte del personal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) “fue que mi hijo nunca iba a hablar, que iba a ser un mueble”.
La madre de este joven explicó que afortunadamente no fue así, ya que no se quedó solo con la versión del neuropediatra del IMSS, y decidió buscar distintas alternativas para conocer más sobre este diagnóstico; después de casi un año en búsqueda de respuestas, llegó a la fundación Atrea.
Atrea, a cargo de Janet Rangel Sánchez, es una fundación experta en el diagnóstico y tratamiento del Espectro Autista, espacio donde le informaron a la señora Juana que su hijo no requería ser medicado, sino que necesitaba atención para el Autismo. “Yo le dije (a Janet) que el doctor del IMSS había recetado medicamentos a mi hijo, pero ella me dijo que no, que nunca los iba a necesitar. Y así llevamos 14 años luchando contra el autismo y jamás lo he medicado”, acotó.