Por Rogelio Hernández López
Sí es noticia muy buena para periodistas esenciales que quieren mejorar su quehacer cotidiano; lo es
también para demostrar que desde la academia se pueden hacer aportes concretos para profesionalizar la
practica periodística y, sobre todo, es un hecho confirmatorio de que el periodismo es una profesión que
requiere utilizar metodologías científicas y diluir la percepción muy extendida de que es un mero oficio.
El martes 21 de febrero, durante la Sexta Semana de Periodismo en Hidalgo se difundió una nota breve en
Facebook que decía: “¡Atención colegas! Se presentó un libro, como una caja de herramientas
(metodologías y técnicas) para hacer periodismo”. De inmediato comenzaron a acumularse 52 reacciones
de periodistas de varias entidades del país, 21 de éstas pedían datos de dónde conseguir el libro. Sí era
noticia de interés para colegas.
La noticia mejoró. Se pidieron más datos de esa Caja de Herramientas a Elvira Hernández Carballido
(una de las coordinadoras) E informa que no es un solo libro, que serán tres y dos de ellos ya se pueden
conseguir impresos y en formato digital.
La academia sí puede ayudar
Los tres tomos incluyen ensayos de mujeres y hombres que hicieron reporterismo y que hoy imparten
clases y realizan investigaciones académicas en nueve universidades públicas: la Universidad Nacional
Autónoma de México y las de Aguascalientes, Chiapas, Colima, del Estado de México, Guadalajara,
Hidalgo, la Metropolitana y la de Nuevo León.
Informan que lograron reunirse y analizar que desde los estudios (académicos) de periodismo se debe
hacer un compromiso con su profesionalización; que en consecuencia acordaron “compartir técnicas,
métodos y estrategias que reafirmen la importancia de informar a la sociedad de este siglo XXI.” Y
resolvieron llamar al conjunto de textos Caja de Herramientas.
El primer tomo tiene como subtitulo: “Reflexiones metodológicas desde las ciencias sociales”. Este lo
presentaron en Hidalgo, durante la Semana de Periodismo, Elvira Hernández Carballido, Alma Elena
Gutiérrez y Arnoldo Delgadillo.
El segundo tomo, ya también en circulación, tiene como eje: metodologías para hacer periodismo y el
tercero ya está en preparación y lo coordina Elvira Hernández desde la Universidad Autónoma del Estado
de Hidalgo.
Elvira comenta que todos representan “un esfuerzo por hacer un puente entre la academia y el ejercicio
periodístico, en bien de nuestros estudiantes y los planes de estudio de las universidades. Queremos un
mejor periodismo en México. Este año planeamos el tercer tomo y me toca coordinarlo a mí”.
Es profesión, no oficio
El primer tomo alberga 7 ensayos. En el inicial, el doctor Vicente Castellanos Cerda, de la Universidad
Autónoma Metropolitana Unidad Cuajimalpa, lo tituló: El valor de la teoría y la metodología en el
periodismo de investigación.
Castellanos explica ampliamente las dos áreas del periodismo, la del oficio “donde el periodista se hace
en el día a día, y el de la formación, donde el periodista adquiere en la universidad aprendizajes de campo,
así como aspectos contextuales, conceptuales y filosóficos.”
Los otros ensayos de ese primer tomo son:
El periodismo como método de interpretación de la realidad social elaborado por Arnoldo Delgadillo
Grajeda y Aideé Arellano Ceballos de la Universidad de Colima:
El método del periodismo feminista. Una reconstrucción histórica que traza el ejercicio periodístico de
las mujeres mexicanas en la prensa de Elvira Hernández y Alejandra Araiza de la Universidad de
Hidalgo;
El tercer ensayo de Salvador de León Vázquez de la Autónoma de Aguascalientes es novedoso en su
propuesta de consejos prácticos para Aprovechar la etnografía para hacer periodismo de investigación:
De León refiere que un buen etnógrafo debe ir a los sitios, volver con información sobre la gente que vive
allí, y poner dicha información a disposición de la comunidad profesional de un modo práctico; si en esa
cita sustituyéramos las palabras “etnógrafo” por “periodista” y “comunidad profesional” por “ciudadanía”,
la sentencia tendría completo sentido para vincular métodos y técnicas para informar.
Agrega: “Muchos periodistas de nuestro país son etnógrafos prácticos, aunque no lo sepan. Hay
periodistas que atraviesan el país acompañando a los migrantes centroamericanos… Los hay también que
acuden a las comunidades que viven problemas graves como el despojo por parte de las empresas
transnacionales… entre otras cosas. Y se dan a la tarea de convivir con ellos, sufrir con ellos.”
Ejemplos de profesionalidad
El resto de los ensayos contienen varios ejemplos de trabajos de periodistas profesionales.
Sobre La autoetnografía en el ejercicio periodístico de Alma Elena Gutiérrez Leytón de la Universidad
Autónoma de Nuevo León; Pautas para escribir relatos periodísticos de Francisca Robles de Universidad
Nacional Autónoma de México; y Periodismo colaborativo, recuperación de una apuesta metodológica
en investigación de Sarelly Martínez Mendoza y Diego Noel Ramos Rojas de las universidades públicas
de Chiapas y de Guadalajara.
El segundo tomo tiene, como ejes, ejemplos de la práctica profesional y de las metodologías útiles para el
periodismo. Incluye los temas:
Adaptación de las técnicas de investigación de la metodología de las Ciencias Sociales a la metodología
del periodismo de investigación; Definiciones del fotoperiodismo de nota roja; Las mujeres presentes al
escribir historia del periodismo; La voz femenina en el periodismo deportivo en el Valle de Toluca.
Pasión y deporte bajo la lupa de las mujeres.
Y como pequeños manuales, propone las guías metodológicas: La entrevista como género periodístico y
técnica de investigación cualitativa; Aportes para el periodismo de investigación; Los ojos profundos del
periodismo ambiental; Fuentes de información y perfil del periodista.
En conversación con la doctora Elvira Hernández Carballido se le pidió el sitio web o plataforma digital a
la que deban dirigirse los interesados para comprar los dos primeros libros en formato digital o impresos,
que no los regalen. Corramos la noticia.
El tomo uno se puede comprar en la editorial: [email protected]; y el número dos se
adquiere en Amazon https://www.amazon.com.mx/Caja-herramientas-Reflexiones-metodolog%C3%ADas-periodismo-
ebook/dp/B0BTB4QS98/ref=sr_1_2?__mk_es_MX=%C3%85M%C3%85%C5%BD%C3%95%C3%91&crid=1AFT9WIYWR45
0&keywords=arnoldo+delgadillo&qid=1675099360&sprefix=arnoldo+delgadi%2Caps%2C350&sr=8-2>
Los aportes
El aporte mayor de los ensayos en los tres libros no es solo para periodistas: demasiados políticos y
funcionarios todavía dicen que el periodismo es un oficio y se niegan a reconocer que es una profesión del
mayor interés público.
Son muchas personas que trabajan en el medio o estudian periodismo que solo conocen los anacrónicos
manuales de periodismo del siglo pasado, que insisten en que este es un oficio y que la academia solo
enseña teorías y no prepara para la práctica.
Peor aún, es posible probar que son demasiados los y las colegas que se subestiman por la creencia de que
practican un oficio y por eso aceptan los maltratos laborales, profesionales y hasta personales.
Por todo, insisto en que la aparición del primer libro de la Caja de Herramientas sí es noticia muy buena
para las y los periodistas esenciales (son quienes hacen reporterismo en la calle, en las fuentes y no solo
plagian trabajo de otros para ganar vistas en sus redes sociales o hacer comentarios sin sustento).
Esos tres libros muestran también lo que debería ser una buena práctica de las escuelas de comunicación y
periodismo: vincularse con el ejercicio cotidiano y ayudar a la capacitación continua de las y los
trabajadores del periodismo, coadyuvar a profesionalizar a tantos que se arriesgan con malas prácticas por
impreparación. Mirada de reportero.