Alberto Witvrun.-La presidenta municipal de Tizayuca, Susana Araceli Ángeles Quezada animada por las encuestas que dan ventaja a Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ya levantó la mano por si acaso la dirigencia nacional decide que sea candidata y no candidato quien dispute la gubernatura de Hidalgo el próximo año, pero sus aspiraciones como las de Vicente Charrez Pedraza y Francisco Patiño Cardona deben ubicarse en el contexto de que no con cualquier candidato ganan.
Son válidas sus aspiraciones, pero su posicionamiento en el municipio que gobierna ha caído por la inseguridad manifestada en múltiples ejecuciones y creciente ola de delitos del fuero común y la incapacidad del ayuntamiento para dar respuesta a las demandas ciudadanas y para cumplir sus promesas de campaña, tanto que el pasado fin de semana un grupo de vecinos bloqueo la carretera México – Pachuca en protesta por la escasez de agua potable.
Es claro que hoy los tres mejores posicionados son hombres: el Senador Julio Menchaca Salazar y los diputados federales Cuauhtémoc Ochoa Fernández, Navor Rojas Mancera y el local Francisco Xavier Berganza Escorza, este último con el antecedente de dos campañas para gobernador que perdió, una diputado federal y otra de Senador, aunque no siempre el más conocido es el mejor, si se revisan sus negativos.
En Morena se debe analizar cuidadosamente lo que sucedió en Pachuca en Octubre de 2020, donde con 27 puntos de ventaja perdieron el ayuntamiento capitalino porque se aseguraba que con cualquiera ganaban y equivocaron, por más que el perdedor quiera culpar de su derrota a que todo mundo lo traicionó incluyendo a periodistas y medios de comunicación.
Querer en política está bien, pero la distancia al poder a veces es muy amplia y, si bien Ángeles Quezada no es la única mujer en los cuadros de Morena, ninguna de las que pudieran mencionarse por hoy tiene el posicionamiento necesario en todo el estado para competir con posibilidades de triunfo en la elección constitucional, pero todo puede suceder, por lo pronto queda claro el mensaje en la visita de fin de semana, del dirigente nacional.