Tula de Allende.-Juan Carlos Olguín, presidente de la asociación Projardín de la zona centro, lamentó que las bajas ventas se mantienen para sus agremiados y en todo el municipio a un año ya de que, en Hidalgo entrara en observancia las restricciones sanitarias a consecuencia de la pandemia de coronavirus.
En entrevista, el dirigente aseguró que el desplome de los ingresos de los 110 o 120 comerciantes del jardín Constitución -lugar de origen de la asociación- ha sido igual o mayor al 50 por ciento.
Mencionó que hay negocios en que las bajas son mayores, e incluso hay comercios que no venden nada en todo un día, pero sostuvo que, si han podido sobrevivir es debido a la buena administración que han tenido y a que antes de la emergencia sanitaria, sus propietarios tenían algo de ahorros.
“Por ejemplo, están los comercios que se dedican a la venta de uniformes, los cuales me han dicho que de plano sus ventas bajaron al 0 por ciento debido a que ahorita no hay clases presenciales, y los estudiantes no utilizan prendas homogéneas, sino la ropa que a diario usan en casa”.
Aseveró que las papelerías, tiendas de mochilas y en general los negocios dedicados a la comercialización de productos escolares, se han ido abajo por la falta de clases presenciales, por lo que también muchos negocios que estaban agremiados a Projardín han cerrado sus puertas.
“Al menos 10 establecimientos que estaban antes de la pandemia han cerrado sus puertas”.
Aún con el panorama adverso, agradeció la disposición de la Copriseh y el ayuntamiento para autorizar la extensión de horarios y días de funcionamiento.
Por Miguel Ángel Martínez