Alberto Witvrun.- El nuevo encuentro entre el jefe de la clase política gobernante Julio Menchaca Salazar y el senador Cuauhtémoc Ochoa Fernández llamó la atención en medio de la polémica que
desataron las versiones encontradas del Gabinete de Seguridad y las organizaciones
feministas defensoras de derechos humanos de lo sucedido el 8M, por lo que puede
representar en beneficio para Hidalgo y sus habitantes si los esfuerzos se suman y
coordinan.
En sus recorridos por el interior del estado, el legislador mantiene una narrativa de
reconocimiento y respaldo al titular del Ejecutivo estatal, en uno de los recientes ante
cebaderos del Altiplano hidalguense que denunciaron abusos de la industria cervecera,
con los que se encontró en Apan, les pidió sumar esfuerzos con el mandatario que trabaja
para consolidar la transformación en la entidad.
Hasta donde se conoce, en el circulo del gobernador se comentó que la reunión fue
cordial y en sus redes sociales Ochoa Fernández, expuso que dialogaron “respecto al
trabajo coordinado en beneficio de las familias de nuestro estado” y aparecen ambos
personajes sonrientes en la imagen difundida por el vicecoordinador político de
Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en el Senado de la República.
Apenas trascendió la reunión que tuvo lugar en el cuarto piso de palacio de gobierno,
cuando se reinició la andanada de ataques mediáticos en contra del de Nopala de
Villagrán, claro indicador de que a alguien en las estructuras de poder burocrático o
político no le agrada el dialogo directo entre el gobernador y el senador a quien han
insistido en ubicarlo como “enemigo” del mandatario.
Como sea las señales que envía el gobernador son importantes y positivas para consolidar
el cierre de filas ahora que viene la elección del Poder Judicial y para los procesos que
seguirán: Revocación de Mandato y en 2027 elecciones federales intermedias, de
diputados locales y ayuntamientos, cuyos resultados dependerán de lo que se construya
ahora.
