Alberto Witvrun.- La disputa por algo así de 247 hectáreas ubicadas en los municipios de Mineral del Monte y Mineral de la Reforma, es más complicado de lo que parece, no es solamente la disputa
de dos grupos, ya que el conflicto es muy añejo y nadie desde hace varios gobiernos
estatales y municipales han querido hacer frente al conflicto por lo radical de las partes
que se han querido apropiar de este polígono.
Hoy se dice que la Unión Nacional de Trabajadores Agrícola (UNTA) de Martha López Ríos
en complicidad con el subprocurador Iram González Pérez quiere despojar de esa
superficie a la Asociación de Pequeños Propietarios en Defensa de Tierras del Poblado
Velillo, aunque corre una tercera versión de que las tierras en disputa no son ni de una ni
de otra organización.
Son más bien propiedades privadas de dos conocidas familias realmontenses, que debido
a la belicosidad del grupo que se dice despojado, ha dejado todo en manos de la autoridad
agraria, que no ha resuelto nada, mientras que los gobiernos municipales hacen como que
hacen, pero no hacen nada y prefieren que el conflicto social se avive y se convierta en
una bomba de tiempo, que mal puede terminar.
No es cosa menor porque esa frontera entre los minerales de la Reforma y del Monte, es
tierra de nadie, ninguna de las policías municipales se atreve a ingresar ante algún
llamado ciudadano, hace unos años cuando se reportó un problema en una fiesta o baile
una patrulla del Mineral del Monte fue destrozada, así que con ese antecedente nadie
intenta resolver el conflicto.
Así que la autoridad agraria, primero tiene que emitir una definición oficial de a quien
pertenece esa superficie y luego en una acción de política interior buscar resolver lo
social, con la intervención de los gobiernos municipales antes de que se complique más y
esto termine en una tragedia, porque hay intereses nada transpartentes.
