Por Rogelio Hernández López
Hace días busqué al reportero Roberto Rock para dos asuntos. Antes le comente que estaba circulando
nuevamente en la Web aquella entrevista que le hicieron en 2017 sobre historias de periodistas y de sí
mismo. Primero le pedí datos para confirmar una tercera actividad suya que pocos conocen: es experto y
activo en protección a periodistas en el grupo de empresas de prensa Alianza de Medios Mx.
– Voy a escribir una estampas tuyas que yo he testificado—le dije a Rock. Pero, le percibí un temorcillo a
ser expuesto públicamente. Quien quiera criticarlo correctamente tendrá que ponderar su trayectoria de 45
años en el periodismo y cómo realiza hoy tres actividades profesionales que lo hacen singular como pocos.
Las otras dos funciones son las de propietario, desde 2008, del exitoso medio nativo digital de
información política, La Silla Rota (en junio de 2022 Comscore lo ubicó en el tercer lugar de volumen de
usuarios) y, además, desde septiembre de 2021 regresó por tercera vez como alto directivo de El
Universal, ahora como Director Ejecutivo Adjunto.
Reportero circunspecto
A fines de 1982 en una charla personal le comenté a Arnoldo Martínez Verdugo que si había registrado
que en su campaña como candidato a la presidencia de la República por el Partido Socialista Unificado de
México (PSUM) tres personas que estuvieron en ella de principio a fin. –¿Quiénes, mano? – le dije — el
reportero de El Universal Roberto Rock Lechón, el reportero de Excélsior Rogelio Hernández López – y
la tercera? – inquirió – Pues, tu, el candidato – respondí y la arranqué una carcajada.
Desde 1981 al cierre de campaña en la plaza de la Constitución los tres recorrimos 38 mil kilómetros ,
estuvimos en 202 municipios y poblados, en 311 actos públicos (167 mítines, 65 comidas populares,
visitas a 10 penales con prisioneros políticos. También en marchas, foros, encuentros y ofrendas florales.
En cada actividad del candidato, el reportero de Excélsior se metía incluso a los semiprivadas, hacía
apuntes acuciosamente en tarjetas y tomaba fotografías. El reportero de El Universal, Rock, también lo
hacía, aunque con menos intensidad.
El trato durante meses ayuda a percibir mutuamente la personalidad de las personas. Roberto parecía muy
formal, de hablar preciso, sin altisonancias, de movimientos corporales educados, circunspecto pues. Pero
en confianza hacía las bromas más sarcásticas y punzantes que ningún otro periodista pasajero de El
Machete (el autobús donde viajábamos los tunde máquinas). Por todo eso yo le bromeaba que, por su
figura alta, pelo rojizo, actitud casi flemática, sus apellidos Rock Lechón y ese espíritu sardónico, era el
primer minero inglés nacido en México. Cordialidad.
A la mitad de la campaña Sabino Hernández, coordinador general y el ex militante del Partido Popular
Socialista, Manuel Stephens comenzaron a circular un corrillo entre los equipos de activistas: que Rogelio
Hernández, quien todo anotaba, seguramente informaba a Gobernación. Roberto se percató, increpo a los
murmuradores, pero también quiso verificar y preguntó a su colega por qué apuntaba hasta minucias. Le
respondí: –Yo estuve en el PCM, conozco a las izquierdas políticas. Quiero hacer un libro de la primera
campaña legal a la presidencia de los comunistas porque es algo histórico – Yo quiero participar – dijo
sinceramente interesado, pero también para difundir esa intención y así quitarle el estigma de agente de
gobernación a su colega. Inmediatamente después de las elecciones ambos reporteros iniciaron la
redacción de 354 páginas de un tomo testimonial de dos reporteros que se llamó Zócalo Rojo, libro que
por cierto en dos meses estará en versión digital después de 40 años.
Roberto Rock en esa campaña cumplía unos tres años de haber ingresado a su diario, primero como
corrector de estilo, luego como reportero. Después del libro fue designado como coordinador fundador de
la agencia de noticias de El Universal y como coordinador inicial de noticias de los estados. Allí se
percataron que tenía iniciativa, solvencia profesional para varias tareas simultáneas y esa singular
circunspección. Rogelio Hernández López fue nombrado cronista parlamentario para Excélsior.
Hechura de un medio
A diferencia de la mayoría de periodistas profesionales de su generación, Rock se desarrolló en un solo
medio, pero en prácticamente en todas las posiciones. El 7 de julio, hace unos días, los alumnos de
Periodismo de la Agencia Informativa UDEM hicieron una sinopsis de su trayectoria. Supieron que nació
en la Ciudad de México en 1956, pero tampoco pudieron averiguar el día ni el mes. Los otros datos, al
parecer si los verificaron:
1978.- Licenciado en periodismo por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad
Nacional Autónoma de México (UNAM). Ingresó a El Universal.
1981-1982.- Hizo la cobertura de la campaña de Martínez Verdugo y es coautor del libro Zócalo Rojo
1986.- Fundó la agencia de Noticias El Universal. 1987 – Creó y editó la sección Estados en El Universal.
Inició la columna Política y República y fue enviado especial a Estados Unidos, Medio Oriente y Europa.
1990.- Becado por Ford Foundation y la Fundación Miguel Alemán A.C. en Washington, D.C., donde
participó en The Baltimore Sun.
1991.- Subdirector editorial de El Universal.
1996.- Director editorial de El Universal.
2001.- Promotor del Grupo Oaxaca y de la Ley de Acceso de la Información Publica en México
2002-2003.- Director editorial de El Universal Gráfico. Coautor del libro Comunicación y transparencia
de los poderes del estado, junto a Juan Francisco Escobedo.
2007.- Vicepresidente de El Universal.
2008.- Inicia la construcción del grupo La Silla Rota, sitio informativo multimedia
2009.- Vicepresidente de la Comisión Contra la Impunidad de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
- Escribió el libro Los Intocables.
2021 (septiembre) .- Regresó a El Universal como Director Ejecutivo Adjunto.
Defensor de periodistas
El 14 de julio, la pregunté para confirmar, lo que ya algunos sabíamos, que aparte de sus
responsabilidades en La Silla Rota y en El Universal, su tercera función trascendente es en una coalición
de empresas mexicanas de prensa para la defensa de periodistas, Roberto confirmó: “Sí. Soy fundador y
promotor de la Alianza de Medios Mx. No tengo ningún cargo directivo, aunque apoyo en varios frentes de
trabajo.” (https://alianzademediosmx.org/)
Desde 2009. Roberto Rock y la reportera-editora María Idalia activan la defensa del periodismo y de
periodistas mexicanos en la SIP. Ambos son reporteros de formación y también son de los pocos que
supieron empujar para que empresas de prensa mexicanas aceptaran formar ese primer grupo para la
protección a periodistas y contra la impunidad en agresiones. Un frente así no se había integrado durante
décadas porque no habían querido o podido los empresarios .
Rock repite en 2022 que es un obrero de la tecla como afirmaba desde 1981 cuando le conocí. Igual
continúa con su estilo flemático y sarcástico y también defendiendo en lo que coincidíamos, desde
entonces, sobre la esencia de un periodista profesional: “El periodista debe generar, llamar a la reflexión y
al debate dando siempre la mejor y la más puntual información.”
Esa es la trayectoria de hechos de un colega periodista profesional y singular por su triplicidad. Perfil que
fortalece contra los que quieran arrojarlo, otra vez, al paredón virtual de los ignorantes y/o los mal
intencionados que atizan la intolerancia.
En el intercambio de preguntas y respuestas de hace unos días ya no pude exponerle la segunda pregunta.
Si aceptaría participar en un grupo focal de periodistas conocedores y experimentados en los problemas y
entretelas de nuestra profesión para debatir los alcances que debe tener una ley general de prevención y
protección a periodistas. Mirada de reportero.