Arturo G. Alanis. Ixmiquilpan.- Recientes comienzos de obras en un par de comunidades, incitaron el malestar de habitantes de la zona centro de la ciudad, debido a que en este sector no ha sido emprenda una sola acción de beneficio colectivo, por parte de las autoridades del ayuntamiento, encabezadas por la presidente municipal, Araceli Beltrán Contreras.
Algunos comerciantes se quejaron de que la alcaldía no ha rehabilitado las avenidas y calles principales, mismas que resultaron deterioradas y en las que no son pocos los baches, producidos por las recientes lluvias, y que a su vez representan un serio peligro para los transeúntes y automovilistas, a la par que perjudican a la imagen urbana.
Por otro lado, comenzaron las exigencias de que el ayuntamiento construya un muro de contención a lo largo del río Tula, en el tramo que cruza por el Paseo del Roble, la Unidad Deportiva Municipal, el fraccionamiento San Javier y la colonia Vista Hermosa, para minimizar daños en caso de que se registren más desbordamientos del afluente.
Si bien consideraron los quejosos que todas las localidades ixmiquilpenses son importantes, criticaron que Araceli Beltrán haya dado prioridad a la construcción de un camino, con pavimento hidráulico, en calles poco transitadas de la comunidad de El Durazno, así como por el levantamiento de un techado, en el preescolar del poblado de Ex Hacienda Debodhé, donde no hay actividades presenciales por motivos de la pandemia.
Por tanto, no pocos vecinos y comerciantes recordaron que la alcaldesa tiene un compromiso con los habitantes de todo el municipio, no únicamente con las comunidades que la hicieron ganar en la elección extraordinaria; así que dijeron esperar prontas obras y acciones, en las principales avenidas y calles de la zona centro ixmiquilpense.