Familiares de Pablo López Aguilar protestaron en la Casa Rule, pues aseguran que la negligencia cometida en la Cruz Roja, servicio contratado por la alcaldía de Pachuca, ocasionó la muerte del jubilado el 2 de junio.
De acuerdo con su viuda, el 16 de mayo la víctima estuvo internado en el organismo de asistencia social, después fue dado de alta, pero regresó el 2 de junio por un malestar que le impedía defecar; pero no fueron atendidos, con el argumento de que la tos que padecía era un síntoma de covid-19 y debían mandarlo al nosocomio especial en Actopan, a lo que se negaron porque no había ninguna prueba médica.
Asimismo, aunque estaba programada una intervención para colocarle un marcapasos porque su corazón funcionaba lento, los médicos informaron que no sería aprobada porque el ayuntamiento de Pachuca no accedió a costearla.
La mujer dijo que se presentó a la presidencia para denunciar los hechos, pues el servicio lo contrató el gobierno local y estas prácticas se pueden repetir, como aconteció con el jubilado, quien laboró 40 años en el departamento de Limpias.
«Di la vuelta para hablar y me cerraron las puertas en la cara, creo yo que no nos deben de tratar así. Sí presidencia no paga, ese no es problema de nosotros. En ningún gobierno estatal o del municipio nos habían hecho lo que nos hicieron ahora. No ha salido la señora a dar la cara (Yolanda Tellería) porque el suelo no la merece.
«Para mí era mi marido, yo sé que no lo voy a revivir, pero que se dé cuenta la ciudadanía que nos mandaron a los servicios más bajos. Tenían obligación de atender a mi marido, allí nos dejaron, desde la 1 que llegamos, eran las 5 de la tarde y mi marido allí, de favor les pedíamos que dieran los primeros auxilios y no quisieron».
Por Oliver García