Tula de Allende. El comisario de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), Uriel Moreno Castro consideró en entrevista que el protocolo antilinchamientos que implementó la corporación en la entidad desde el pasado 2 de abril, ha funcionado para inhibir la comisión de estos delitos, que en 2018 sumó cuatro casos.
Aún así, el mando policíaco dijo que hace falta un trabajo coordinado entre todas las dependencias de seguridad para lograr mejores resultados, además sostuvo que se requiere de mayor inversión económica de parte de los municipios.
El funcionario estatal indicó que aunque existe un protocolo, las autoridades no deben confiarse, porque de todas formas los eventos de esta naturaleza siguen presentándose y por ello, para que, cuando hay situaciones de riesgo de este tipo, no se salgan de control y terminen en desgracia se necesita de mucha coordinación.
“Necesitamos mucho la participación de los tres órdenes de gobierno, pero primordialmente el primer contacto es el municipio, la policía municipal, el secretario municipal de gobierno, quienes son los primeros contactos”.
Lo anterior, explicó, se debe a que ha habido casos en que, cuando la SSPH llega a una situación de linchamiento, las policías locales u otras dependencias aún no han entablado dialogo con la multitud, lo que constituye serias dificultades para ellos, pero aún así, destacó, se han sacado adelante los eventos.
“Hemos rescatado a bastantes personas, que afortunadamente no han sufrido lesiones tan graves”.
Por Miguel Á. Martínez