Jesús Sánchez
A tres semanas de las elecciones estatales, todo apunta a que la 4T
difícilmente arrasará en las urnas. ¿Será el adiós a la aplanadora partidista?
Hace unos días la mayoría de las encuestadoras, serias y gansito, le
reconocían a la coalición opositora un triunfo solitario en Aguascalientes y
carro completo para Morena y su banda en los otros estados, pero parece
que las encuestas cayeron en un hoyo negro.
La información cotidiana muestra señales encontradas en las tendencias,
tanto que los observadores imparciales ven dificultades del partido en el
poder para hacerse de la bolsa completa.
Desacuerdos en la dirigencia nacional con las locales, escándalos mediáticos,
distanciamientos de los suspirantes que no recibieron la bendición y el hecho
de seguir colgados a la figura presidencial, ha llevado a la 4T a bajarle de dos
a tres rayitas a su enjundia. Vaya, ni los diplomados en Cuba les han servido.
La 4T no ve claro en Durango con su abanderada Marina Vitela quien un día
avanza y al otro retrocede favoreciendo a Esteban Villegas; tampoco se le
nota muy optimista en Tamaulipas pues el hijo del exgobernador Américo
Villarreal lleva dos semanas que no levanta, y pese a la fuerte presión del
Estado contra el gobernador panista, el candidato César Verástegui lleva
mano en las preferencias.
En un descuido hasta Fayad pierde la oportunidad de ser embajador, pues la
campaña encabezada por la señora Viggiano en Hidalgo podrían darle la
vuelta a Menchaca.
Lo cierto es que en los resultados electorales y otras estrategias Morena
viene de más a menos.
El estatus de Morena en la escena política se debe a la marca presidencial, no
hay más. Bajo esta lógica la perdida de terreno de Morena muestra el
debilitamiento de la marca. ¿Qué no?
Datos curiosos
En este 2022 el PAN juega con cuatro cartas que puede retener o perder:
Aguascalientes, Durango, Quintana Roo (junto con el PRD) y Tamaulipas.
El PRI se juega los últimos bastiones que le quedan, el de Hidalgo y Oaxaca. Si
los pierde solamente le quedarán por defender el Estado de México y
Coahuila pero en 2023. Si los pierde, desaparecerá el priismo de los
gobiernos estatales.
Movimiento Ciudadano (MC) se cuece aparte porque decidió no juntarse con
nadie, le puso distancia a las alianzas como un ensayo a lo que podría hacer
en 2024.
Hasta ahora no pinta para ganar en ninguno de los seis estados en juego,
pero MC se conformará con una rebanadita del pastel electoral.
Lo que hace Dante es convertirse en el fiel de la balanza de las elecciones en
- Le quita votos a la oposición y al mismo tiempo le alivia la presión al
partido en el poder. Dicen que al MC le falta un grado para ser el nuevo
Morena. Vaya, vaya.
En términos de población, los estados que tendrán votaciones el 5 de junio
no son grandes aportadoras votos.
Entre todos los estados en contienda, suman una población de 15.6 millones
de mexicanos.
En contraste, el Estado de México solito tiene una población superior,
estimada en 16.9 millones de habitantes, es la entidad que aporta más votos
en todo el país; el segundo lugar lo ocupa la CDMX.
Para los interesados, Oaxaca ocupa el 10 lugar de los estados del país por
número de población con 4.1 millones de habitantes; Tamaulipas el lugar 14
con 3.5 millones; Hidalgo la posición 16 con 3 millones ; Quintana Roo el 24
del listado con 1.8 millones; Durango la 25 con 1.8 millones y Aguascalientes
la posición 27 con 1.4 millones de habitantes.
Por ahora Morena sigue jugando sin perder.
Peeero. Será en 2024 cuando además de las presidenciales y de la renovación
del Congreso habrá elecciones de gobernadores en la CDMX, Chiapas,
Guanajuato, Jalisco, Morelos, Puebla, Tabasco, Veracruz y Yucatán.
Entonces la cosa cambia pues Morena tendrá que defender cinco estados
donde son gobierno, entre éstos, la CDMX. ¿Y si pierde la CDMX? ¿Y
Veracruz? Chan, chan, chan.
Columnómetro de Aquiles Baeza
1.- Seis horas de bloqueos y nadie hizo nada.
Los bloqueos de este fin de semana en la entrada y salida del paradisiaco
Puerto de Acapulco son una pésima señal para el Tianguis Turístico 2022
edición 46, que arrancará el 22 de mayo.
Dicen que detrás de los bloqueos realizados por transportistas y algunos
comerciantes hay mano negra, pues su demanda es expulsar al Ejército y la
Guardia Nacional del Puerto.
Los que pagaron los bloqueos fueron miles de acapulqueños y turistas y lo
lamentable fue el silencio de las autoridades.
Y si reaparecen los malosos en pleno Tianguis Turístico, ¿van a mirar hacia
otro lado como si no pasara nada? ¿O qué?
2.- Antimonumentos.
Una muestra de empatía social sería que el gobierno de la CDMX reconozca a
la ex glorieta de La Palma como la Glorieta de los Desaparecidos, renombrada
así por los colectivos de familiares de personas desaparecidas, que en México
suman miles.
3.- Un legislador plurinominal no quiere decir estar en muchas nóminas. Para
que no se confundan.
4.- Humillados y ofendidos.
Otra reforma en puerta en el Congreso es la incorporación de la Guardia
Nacional al mando del Ejército.
Como que no tuvo sentido crear una corporación de corte militar con cabeza
civil, que solo sirvió para impulsar una gubernatura y todo para que al final la
Guardia Nacional se convierta en parte del Ejército.
Tendremos un mega ejército, pero con una imagen del nabo, huyendo
desesperadamente del asedio de las bandas del crimen organizado y
dedicadas a frenar las olas migratorias a EU.
No crea usted que todos los mandos del Ejército están felices.
4.- El fin de semana se divulgó un video con el nuevo rostro de Dos Bocas.
Una de dos, dejó de ser corcholata o será la nueva directora de la Refinería.
5.- Barbarismos.
El fin de semana fue destituida la doctora Grisel Salazar @griselsr de la
coordinación de @PeriodismoCIDE, misma que ha destacado como científica
social, acuciosa investigadora y promotora del periodismo libre. Con esta
decisión y otras, la comunidad del CIDE teme que @ElenaBuylla pretenda
llevar a la ciencia a la época de las cavernas.