En Hidalgo, solo 31.9 por ciento de los trabajadores tiene vacaciones pagadas, de acuerdo con el estudio diagnóstico del derecho al trabajo 2018, elaborado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
En el goce de sueldo en el periodo de asueto, no hubo una variación importante entre 2009 y 2017 en el país, al pasar de 51.5 a 52.5 por ciento. Nuevo León es la entidad con la mayor proporción de asalariados con esta garantía, con 74.8 por ciento.
Según el documento, en la entidad la informalidad supera 70 por ciento, al igual que en Guerrero, Puebla y Veracruz. La demarcación también es una de las que tiene menos de 80 por ciento de empleados permanentes, junto con Baja California Sur, Nayarit y Tlaxcala.
Esta situación ocasiona menor estabilidad y menor acceso a capacitación y a las prestaciones asociadas con la generación de antigüedad en un puesto, además de la alta rotación en las empresas. “(Esto) resultaría en menores oportunidades de tener una pensión a lo largo de la trayectoria laboral”, señala.
En 2017, Hidalgo fue una de las entidades con menor número de trabajadores con contrato, con 34.5 por ciento, por debajo de Chiapas, con 35.6; Michoacán, 35; y Oaxaca, 35.6.
Por Oliver García