Miguel Á. Martínez / Tlaxcoapan / Tlahuelilpan. Desde hace dos años y medio el gobierno de Tlahuelilpan dijo -mediante el exalcalde Juan Pedro Cruz Frías- que sólo prestaría ayuda a los deudos de la explosión del 18 de enero de 2019 que fueran originarios de su municipio, que el resto pidan ayuda a sus presidentes, y la misma postura se mantiene con el ejecutivo actual, José Alfredo Díaz Moreno, denunciaron familiares de los fallecidos de la conflagración del viernes negro de hace tres años.
Al respecto, María Guadalupe Cornejo Reyes, quien perdió a su hijo durante el estallido, aseveró que el primero orden en desentenderse de los dolientes de la deflagración fue el municipal de Tlahuelilpan, y que, por ello, ya no se acercan a solicitar nada de este ayuntamiento, que en el marco del tercer aniversario de la emergencia no se ha ido a parar en el sitio por ningún motivo.
“Sabemos que al igual que Juan Pedro Cruz, el mandatario actual se pronuncia en los mismos términos, entonces ya no nos acercamos… para qué exponerse a malos tratos o a que no nos reciban”.
La mujer, originaria de la comunidad de La Loma, de Tezontepec de Aldama sostuvo que a los deudos del 18E, los han dejado abandonados los tres órdenes de gobierno, dado que no han cumplido su palabra de construir el memorial en la zona cero y que hasta los programas sociales que alguna vez les dio el gobierno federal ya les fueron retirados.
Con la versión de Cornejo Reyes coincidió María de Jesús Pacheco Mota, de la localidad de San Isidro El Tanque, también de Tezontepec de Aldama, quien indicó que ya se olvidaron de ellos, y que el único presidente que les ha dado un poco de ayuda es el de Tlaxcoapan, Jaime Pérez Suárez, a quien le requirieron lonas y sillas para el tercer aniversario y se las concedió sin problemas.
Pero los demás, aseguró, nos han dejado a nuestra suerte, nos dicen que ya no nos van a dar: “y, ok, (sic) estoy de acuerdo en que no nos den a todos, algunos podemos valernos por nosotros mismos, pero que por lo menos ayuden a quienes más lo necesitan, a los niños que por ejemplo, se quedaron huérfanos, a los adultos mayores a los que mantenían los hijos que murieron en el incendio”.
Cabe recordar que el 18 de enero de 2019 (18E), ocurrió la explosión del ducto de Pemex Tuxpan – Tula a la altura del kilómetro 226 ubicado en un predio denominado Las Viborillas, correspondiente al municipio de Tlaxcoapan.
Producto de la emergencia, En el lugar de la conflagración murieron 79 personas, mientras que 58 más perecieron al recibir atención médica en hospitales tanto nacionales, como extranjeros.