Alberto Witvrun.- A propósito del 43 aniversario del Sistema de Radio y Televisión de Hidalgo (RyTVH) que
popularmente la población identificaba como Canal 3 y 98.1 en diferentes espacios se
cuestiona el contenido de su programación y su slogan de ser El Canal del Pueblo, lo que
requiere una revisión a fondo de objetivos y propósitos de estos medios de comunicación
permisionados que nacieron con un doble propósito: social y educativo.
Su origen lo tiene en la visión de quien fuera secretario de Planeación del gobernador
Guillermo Rossell de la Lama, el arquitecto Manuel Larrosa Irigoyen que los concibió
esencialmente como instrumentos al servicio y beneficio principalmente de los
hidalguenses de las zonas marginadas lo que se cumplió no sin fallas en sus primeros 20
años de existencia que contemplan también los gobiernos de Adolfo Lugo Verduzco y
Jesús Murillo Karam.
En la primera etapa de la televisión hidalguense, el equipo dirigido por Marco Antonio
Rodríguez Revoredo que provenía del sistema 4+ de Veracruz, produjo programas con
contenido educativo y de capacitación, sin olvidar el entretenimiento y la información,
además de formar personal técnico y de producción que alcanzó reconocimiento y
premios como sucedió con el documental Xantolo de Fernando Triana.
La programación iba desde la orientación médica hasta como debían sembrarse peces y el
noticiero 3 en la Noticia y la transmisión de eventos deportivos populares, no sólo los
partidos de futbol profesional; todos los programas antes de salir al aire eran sometidos al
análisis y punto de vista critico de la directora de producción Ana Iris Nolasco, lo que se
fue perdiendo en los gobiernos de Manuel Ángel Núñez Soto y Miguel Ángel Osorio
Chong.
Y que decir de lo que sucedió en las administraciones de Francisco Olvera Ruiz y Omar
Fayad Meneses donde hubo en el primero un escandaloso fraude y en el segundo la
perdida de las frecuencias de la mayoría de las radiodifusoras entre ellas las emblemáticas
98.1 y el Vocero Huasteco, que este gobierno trata de recuperar, pero lo que no ha podido
recobrar es calidad y contenido de su programación, la que debiera someterse a revisión.
