Arturo G. Alanis. Ixmiquilpan.- Una treintena de delegados municipales reiteró su exigencia al gobierno del Estado, ante la falta de atención a los daños causados tras el desbordamiento del río Tula, acontecido desde septiembre del año pasado y que significaron pérdidas por casi 120 millones de pesos.
Por ese motivo, este viernes 3, dichas autoridades comunitarias salieron rumbo a la capital hidalguense, acompañando a la presidente municipal, Araceli Beltrán Contreras, quien sostendría una reunión con el secretario de gobierno, Simón Vargas Aguilar, para tratar aquel asunto y buscar vías de solución.
La urgencia de los representantes de las colonias, barrios y comunidades afectadas, de que en breve sean reparados los daños a la infraestructura urbana, viviendas y establecimientos comerciales, por los latentes riesgos que representa, para los habitantes, la actual temporada de lluvias.
En ese contexto, reiteraron que los funcionarios estatales “sólo vinieron a tomarse la foto, entre las desgracias de los ixmiquilpenses, pero nunca nos han dado soluciones”, esto, ante la premura de que sea resuelto un total de 16 expedientes que corresponden a obras de reconstrucción pendientes.
Adelantaron las autoridades auxiliares que, en caso de no obtener respuestas positivas, recurrirán a una serie de movilizaciones, sin parar “hasta que el gobierno estatal cumpla con su compromiso y regrese la tranquilidad a los ixmiquilpenses”.
El tema ya había sido tratado recientemente por el diputado local, Edgar Hernández Dañu, lo mismo que por la legisladora federal, Ciria Yamile Salomón Durán, pero hasta la fecha no habían dado a conocer si ya se entrevistaron o no con funcionarios del Ejecutivo de Hidalgo, a los que presumiblemente solicitarían que atendieran dicho problema social.