Arturo G. Alanis. Ixmiquilpan.- Autoridades municipales refrendarán contratos de comodato para seguir administrando la Biblioteca Central Carlos Fuentes y el Parque Benito Juárez, ubicados en el centro de la ciudad; estos trámites, por solicitud del gobierno del Hidalgo, debido a que esos predios pertenecen al patrimonio estatal.
El asunto fue ventilado durante la doceava sesión extraordinaria de la Asamblea Municipal, donde la secretaria técnica del Despacho de la alcaldía, Yesenia Rubí Sánchez Miranda explicó que la solicitud de comodato llegó al ayuntamiento el pasado 29 de agosto, dirigida por el director de Patrimonio Inmobiliario de Hidalgo, Jorge Armenta Hernández.
En ese sentido, detalló que el gobierno de la entidad realizó un diagnóstico en todo el territorio hidalguense para identificar los inmuebles que le pertenecen, razón por la cual están solicitando a todos los ayuntamientos firmar los comodatos que correspondan, sin que Ixmiquilpan sea excepción.
Especificó que en este municipio comenzará la renovación de comodatos con el predio denominado El Molino Las Flores, donde se encuentra la Biblioteca Central Carlos Fuentes, teniendo extensión que rebasa un mil metros cuadrados y está avalada por escritura pública número 3383, del 27 de julio de 1991, así como la propiedad estatal del Parque Benito Juárez, que tiene una superficie de 30 mil 173 metros cuadrados.
Según normativa de los contratos de comodato, el ayuntamiento está obligado a mantener en óptimas condiciones los predios referidos, así como contratar un seguro de cobertura amplia con responsabilidad civil, además de mantener al corriente los pagos de servicios (agua y luz), remitiendo los recibos ante la Dirección de Patrimonio Inmobiliario de Hidalgo. Dejó en claro la funcionaria municipal que el contrato de comodato tendrá vigencia de un año, a partir del 1 de enero al 31 de diciembre, y que en los casos descritos concluirán a finales del presente 2023 y deberán ser renovados en enero del siguiente año, pero 30 días antes deberá presentarse una carta manifestando la intensión de seguir haciendo uso de esos bienes públicos estatales.