Miguel Ángel Martínez. Tula de Allende.- Noel Olguín Luna, delegado de Michimaloya, exigió a la Comisión Nacional del Agua (Conagua), rehabilitar la carretera Tula-Michimaloya, ya que la arteria quedó en pésimas condiciones luego de ser utilizada por los camiones de volteo que trasladaban lodos del río Tula en las obras del Plan Hídrico.
La demanda del representante vecinal se hizo durante una mesa de trabajo en la que estuvieron presentes integrantes del ayuntamiento, a los que pidió ayuda para ser escuchado, ya que en múltiples reuniones con personal de la dependencia federal ha planteado el tema, sin haber logrado eco hasta ahora.
Adicional a la exigencia de la arteria, requirió también que se reubiquen los sedimentos vertidos por la dependencia en la zona urbana de la comunidad -en los límites con Xitejé de Zapata- esto ya que el sitio donde dispusieron los fangos está próxima a la plaza dominical de La Poza, donde expenden alimentos, por lo que los comensales que los consumen están en riesgo de contraer enfermedades gastrointestinales.
Y es que expuso que el lodo al secarse se convierte en polvo y este vuela con el aire, por lo que puede impregnarse en los alimentos. La autoridad auxiliar denunció que nunca se les demostró que Los lodos no fueran tóxicos, dijo que la dependencia federal descartó cualquier toxicidad en los fangos, pero no lo demostró mediante estudios científicos.
