Para sancionar los delitos de lesiones y homicidios motivados por intolerancia, prejuicios o discriminación hacia personas por sus gustos, orientaciones, rasgos, entre otros, la diputada del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Mayka Ortega Eguiluz, propuso reformar el artículo 121 del Código Penal para el Estado de Hidalgo.
Dentro de su propuesta, la priista señaló que una de las principales causas de homicidios y lesiones recae en la discriminación, así como la intolerancia de algunos seres humanos con situaciones hostiles a las propias, específicamente; color de piel, orientación sexual, posición económica y social así como etnia, físico, ente otros.
En este sentido, explicó que de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación (ENADIS) 2017, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) el 20.2 por ciento de la población de más de 18 años de edad, ha sido discriminada por alguna característica o condición personal.
Asimismo, la ENADIS 2017 identificó que las personas son excluidas o rechazadas de ciertas actividades sociales, mediante actitudes como son las burlas, insultos, ofensas e incluso amenazas, empujones, golpes, generando que algunos declinen de ciertos grupos o comunidades.
La Legisladora local, puntualizó que el 9 de octubre de 2018 se publicó en el Periódico Oficial de la Entidad, el decreto por el que se reforma el Código Penal para el Estado de Hidalgo, tipificando el delito de discriminación a través de una sanción penal de uno a tres años, así como una multa de 150 a 300 veces el valor diario de la Unidad Medida y Actualización, a quien por razones de esta índole niegue servicios de salud, derechos laborales, incite al odio o violencia y excluya.
Por lo anterior, solicitó que se considere la modificación del artículo 147 del Código Penal para el Estado de Hidalgo en las fracciones tres y cuatro, para que se considere un homicidio y lesiones calificadas bajo el rubro de discriminación cuando exista una persecución a la víctima que lo torture psicológicamente.
Por Itzell Molina