Miguel Á. Martínez. Región Tula. Urgieron transportistas de la región Tula – Tepeji a la Secretaría de Movilidad y Transporte a brindarles información clara y precisa sobre el nuevo esquema de trabajo que se seguirá para las supervisiones que se llevarán a cabo mediante las empresas Altter y Berumen, a fin de evitar malos entendidos.
Los permisionarios consideran que, con la contratación de las firmas, se “triangularán” los operativos, lo que no es conveniente para ellos, puesto que aseguran que violan la secrecía en cuanto a los datos personales de los concesionarios y de las propias unidades.
Asimismo, sostuvieron que, con la participación de las citadas compañías, se romperá la funcionalidad del método que se utilizaba para implementar los operativos para el combate de unidades de las llamadas toleradas o piratas, lo que podría ser perjudicial para los transportistas.
En este contexto, temieron que las “supervisiones” de las empresas se puedan convertir en un acoso hacia los permisionarios, porque las firmas no saben cómo se manejan las cosas, lo que pudiera ir en detrimento de ellos.
Dijeron que la participación de las dos compañías se puede traducir en multas y sanciones por brindar servicios de formas presuntamente irregulares.
Indicaron que el argumento de los llamados diagnósticadores, forma parte del programa de ordenamiento de transporte convencional, que comprende del día 8 de septiembre al 25 de octubre.
No obstante, insistieron en externar su molestia al señalar que jamás se les avisó con antelación de estás supervisiones, y tampoco se les informó en qué consistían, por lo que reiteraron la exigencia de claridad.