Miguel Á. Martínez. Tula de Allende.- Las plantas potabilizadoras para retirar metales pesados de las aguas potables de siete pozos de Tula y Tepetitlán siguen sin operar, pese a una inversión global de 35 millones de pesos, acusó Yuri Zareth Uribe Montero, dirigente del Movimiento Social por la Tierra (MST).
En entrevista, la dirigente explicó que la primera inversión, luego de que en diciembre de 2018 se informó que el agua usada para consumo humano de seis pozos de Tula y Tepetitlán estaba contaminada con metales pesados, fue de 30 millones de pesos para construir igual número de potabilizadoras.
Recordó que estas obras “se ejecutaron” durante la administración del exgobernador Omar Fayad Meneses, mediante la Comisión Estatal del Agua (CEA), que supuestamente las entregó como listas entre 2019 y 2021, pero hasta la fecha siguen sin funcionar.
Ya durante la actual gestión, con el gobernador Julio Menchaca Salazar, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) destinó, a mediados de 2023, otros 5 millones de pesos para subsanar los desperfectos de los complejos con el supuesto fin de, ahora sí, ponerlos en marcha, pero ese recurso se extravió y no se hizo nada.
Ante este escenario, hoy en día las plantas están siendo intervenidas directamente por la Conagua, para por fin arreglarlas y ponerlas a operar.
Uribe Montero Lamentó que, con todo este escenario de corrupción, a más de cinco años y medio de haber descubierto la contaminación en los cárcamos, la gente del suroccidente de Hidalgo, concretamente los vecinos de la parte norte de Tula y la sur de Tepetitlán, sigan consumiendo agua con metales pesados.
En su momento, el exalcalde Manuel H.B., hoy preso por peculado y uso ilícito de facultades y atribuciones, dio a conocer que los cinco millones de pesos adicionales que la Conagua asignó a la CEA para la compostura de las potabilizadoras serían ocupados para la compra de químicos que los artefactos requerían para funcionar.