Arturo G. Alanis. Ixmiquilpan.- Las autoridades de la presidencia municipal evidenciaron que están más preocupadas por el show que por los menesteres de la seguridad pública, pues prefirieron aclarar una controversia sobre la presentación de un payaso que por emitir una postura relacionada con las recientes balaceras que dejaron dos personas fallecidas.
Sobre los recientes actos violentos, registrados cuando apenas concluía el día 1 del año nuevo, mediante comunicado la alcaldía confirmó que se trató de dos ataques armados, uno en un restaurante-bar, sobre la Avenida Insurgentes, en el barrio de La Reforma; el otro en la calle Belisario Domínguez, del barrio de El Fithzi.
En el escueto boletín, se señaló que ambas situaciones fueron atendidas “en coordinación de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal y Estatal, con base en la modalidad de Mando Coordinado con la que trabaja esta entidad”, pero hasta este martes 4 no había emitido alguna postura o pronunciamiento la alcaldesa, Araceli Beltrán Contreras, menos el secretario municipal, Rutilio Pérez Hernández.
Así que luego de aquellas escenas de violencia, no se sabe si las autoridades del ayuntamiento solicitarán mayor apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública de la entidad y de la Guardia Nacional, para reforzar la vigilancia en el territorio ixmiquilpense, sobre todo en las colonias y comunidades contiguas a la cabecera municipal.
En contraste, las mismas autoridades locales no dudaron en emitir una postura, ante la inconformidad de importante número de ixmiquilpenses, por la próxima presentación de un imitador del popular payaso Chuponcito, ante lo cual la alcaldía alegó que en ningún momento se mencionó que acudiría el artista original.
Inclusive, para esos propósitos, Araceli Beltrán ordenó hacer del conocimiento público un comunicado, explicando a detalle la situación del espectáculo que ofrecerá, el siguiente
miércoles 5, el imitador de aquel popular payaso, pero olvidó emitir algún pronunciamiento ante el resurgimiento de escenas de violencia.