Como parte de la conmemoración del Centenario del Incendio en la mina El Bordo, que el 10 de marzo de 1920 dejó 87 personas sin vida, habitantes de la comunidad participaron en la inauguración de un memorial de la zona, que también fue declarada patrimonio intangible de Hidalgo.
En un decreto publicado en el Periódico Oficial del Estado de Hidalgo (POEH), fue emitida la declaratoria, que incluye en el esquema de protección a lugares con significado como los terrenos y restos de las minas de El Bordo, La Luz y Sacramento, así como la fosa común donde fueron sepultadas las víctimas.
El gobierno estatal inauguró el Centro Comunitario que cuenta con una biblioteca, aula multiusos y cancha de usos múltiples para que los habitantes de la localidad acudan a realizar actividades deportivas, culturales y académicas.
Asimismo, el ayuntamiento capitalino develó la placa de un memorial con los nombres de 72 víctimas, pues otros 17 se encuentran en calidad de desconocidos. El objetivo del monumento es atraer el turismo a la zona, que forma parte del Geoparque Comarca Minera y de la Ruta Arqueológica Minera.
Ese día a las siete de la mañana José Luis Linares percibió un incendio al interior de uno de los socavones de la mina e hizo lo posible por la evacuación de sus compañeros, algunos pudieron salir por medio del elevador (calesa) de la mina; sin embargo, al notar que ya no había comunicación ni respuesta con los diferentes niveles y con el retorno del elevador vacío, se afirmó por parte de los administradores norteamericanos que todos pudieron salir.
Sin estar seguros de sí estaba totalmente evacuada, los responsables ordenaron cerrar los tiros de El Bordo y La Luz para así sofocar totalmente el incendio, determinando que cuando no hubiera humo se entraría a rescatar a las posibles víctimas del incendio.
Después de dos días de iniciado el incendio, el día 12 de marzo, se abrió una de las bocas, en el intento de rescate se detectó que muchos cuerpos calcinados estaban en la boca de la mina, personas que aparentemente habían intentado huir y hallaron carradas las vías de escape.
El 16 de marzo, cuando se concretó el rescate, fueron encontrados 87 personas fallecidas y siete sobrevivientes en uno de los niveles, personas que durante seis días soportaron escondidos del humo, bebiendo agua tóxica, sin comida y en la oscuridad total.
La Secretaría de Cultura de Hidalgo será la responsable de un plan de manejo para divulgar los valores históricos y culturales del sitio.
Por Oliver García