*El huachicoleo no ha sido controlado, la situación se agrava con agresión a policías y militares
Tlahuelilpan.- El presidente municipal Juan Pedro Cruz Díaz, llamó a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y a Petróleos Mexicanos (Pemex) a reforzar la vigilancia en los ductos para evitar una nueva tragedia como la de San Primitivo del 18 de enero de 2019, luego de registrarse este lunes una nueva fuga que obligó a la evacuación de varias familias
Los civiles presentaron malestares respiratorios, dijo luego de advertir que la actividad ilícita de robo de hidrocarburos no ha cesado: “No puedo precisar las (tomas clandestinas) que ha habido en los últimos dos meses, pero son varias, lo peor de todo es que se ha agredido a la policía municipal en dos de los últimos tres eventos, pese a que nosotros no nos toca la vigilancia… a quien le toca esa tarea, los exhortamos a que la cumplan”.
El edil recordó la tragedia del 18 de enero entre los límites de Teltipán en Tlaxcoapan y su demarcación, hecho que costó la vida a 137 personas originarias de ocho municipios de Hidalgo y uno del Estado de México: “lo que queremos es evitar otra desgracia”, pero expuso que solos no pueden se requiere el respaldo del gobierno federal para contrarrestar el fenómenos.
A menos de dos meses de concluir los gobiernos municipales 2016 – 2020 y tras casi un año y medio del viernes negro, Cruz Díaz, mencionó que, de alguna manera se ha relajado el resguardo de los oleoductos que corren por su localidad, ya que de nuevo se empiezan a ver fugas de energético por tomas clandestinas.
Sobre la fuga de gasolina dijo que se reportó alrededor de las 00:15 horas de ayer lunes, y se controló aproximadamente 2 horas y media después., pero fue necesaria la evacuación de quienes viven cerca de donde se registró la fuga en esa toma clandestina.
El derrame se focalizó en una parcela cercana a la zona cero, (lugar de la conflagración del 18 de enero de 2019) y dijo que esta vez sí se ubicó completamente en territorio de Tlahuelilpan, y no como la vez pasada, que se situó en el paraje de Potreros en Tlaxcoapan, y en que la zona fue erróneamente adjudicada a Tlahuelilpan.
Finalmente dio a conocer que la emergencia no causó un gran desembolso económico para la alcaldía, puesto que ya se cuenta con equipamiento e insumos para la atención de este tipo de emergencias, como herencia de lo que se había adquirido después del llamado Viernes Negro, pero insistió en la urgente necesidad de que el Ejército Mexicano y la paraestatal refuercen la vigilancia en los ductos para inhibir el huachicoleo.
Por Miguel Ángel Martínez