Jocelyn Andrade.- Antes de iniciar cualquier obra en planteles educativos, la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH) revisa la situación legal del terreno, pues si el espacio carece de escrituras, no se autoriza el uso de recursos públicos y esta condición busca prevenir conflictos legales y proteger el patrimonio educativo.
Natividad Castrejón Valdez, titular de la SEPH, informó que más de 3 mil escuelas en la entidad operan sin documentos de propiedad y hasta ahora, sólo 80 planteles lograron completar el proceso de regularización notarial, y los expedientes se entregan al Instituto Hidalguense de Educación una vez concluidos.
Explicó que la dirección jurídica de la dependencia mantiene labores permanentes para sanear los registros legales de cada inmueble escolar y el trámite implica trabajo con notarios y revisión de antecedentes legales, lo que retrasa la inversión en infraestructura.
En este contexto, un plantel de nivel superior ubicado en Zimapán se encuentra dentro de un juicio civil, pues un particular busca recuperar el terreno donde se ubica la universidad, bajo el argumento de ser heredero de los antiguos propietarios; pero el espacio fue donado hace 14 años.