La crisis económica que ya viven los dueños de escuelas y gimnasios deportivos en Hidalgo y en todo el país, ante su cierre por la pandemia del coronavirus, ha despertado diversos comentarios sobre la urgente reapertura.
Aun cuando los instructores y entrenadores siguen atendiendo a sus alumnos con clases virtuales, han expresado su malestar, al informarse oficialmente que seles autorizará abrir sus puertas hasta el mes de octubre.
Sin embargo, a través de las redes sociales han expresado su malestar, al autorizar la apertura de restaurantes y bares, dejando al margen la promoción deportiva, como una actividad básica para los deportes de contacto y de gimnasios, que ayuda de alguna manera a contrarrestar las enfermedades, no sólo de Covid 19, sino para estar bien físicamente.
El pago de rentas y de personal, es el principal problema que afrontan, ya que no tienen con qué cubrir los pagos y la mayoría está por cerrar de manera permanente sus instalaciones, que afectaría a sus alumnos.
En Hidalgo, ya hay varios instructores que se están uniendo a fin de solicitar un apoyo de las autoridades del estado, a través del Instituto Hidalguense del Deporte, para recibir un apoyo que les permita continuar con sus actividades.