Luego de que se diera a conocer el feminicidio de Ingrid Escamilla, integrantes del Comité de Lucha Universitaria (CLU), se unieron a las manifestaron nacionales por este caso, donde exigieron seguridad, justicia y la no revictimización de este sector, así como la sensibilidad y profesionalismo de los medios de comunicación.
Durante una concentración realizada en las inmediaciones de Plaza El Reloj, una de las estudiantes, quien solicitó mantener su nombre en anonimato, señaló que diariamente cerca de 10 mujeres son asesinadas al día a nivel nacional y el 95 por ciento de estos casos quedan impune, siendo un número alarmante.
Aclaró que en Hidalgo aún no se cuentan con estadísticas reales sobre el número de feminicidios ocurridos durante el 2019 y lo que lleva de este año, sin embargo, los que se logran conocer son debido a la trascendencia que tienen en los medios de comunicación y el “eco” que hacen las familias.
En este sentido y tras darse a conocer en diversos medios de comunicación así como en redes sociales fotografías del cuerpo de Ingrid Escamilla, exhortó a los medios de comunicación tener empatía y compromiso social con lo sucedido, dejando aún lado sus intereses económicos.
La defensora de las mujeres, invitó a los periodistas o reporteros capacitarse en perspectiva de género para evitar más notas de este tipo donde ponen “tapada la cara del feminicida pero al descubierto el cuerpo de la víctima”, generando mormón en la sociedad.
Asimismo, puntualizó que dentro de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) existen casos de acoso sexual y violencia de género, los cuales en muchas ocasiones no son denunciadas debido al miedo que generan los maestros al ser “protegidos” por altos mandos, por lo que le solicitó al rector de esta institución, Adolfo Pontigo Loyola, no “tapar” a estas personas y apoyar a los denunciantes sean mujeres u hombres.
“No sirve de nada que cada 25 de mes se vistan de naranja y nos den un discurso armado si al final no nos creen, no sirve de nada, nos deben garantizar seguridad”, concluyó.
Por Itzell Molina