Arturo G. Alanis. Valle del Mezquital.- Quedó en evidencia la incapacidad e indiferencia de los servidores públicos de la Subsecretaría de Gobierno, de la Región del Valle del Mezquital, porque no pudieron impedir los bloqueos carreteros, efectuados este martes 22, en la vía federal México-Laredo y en el camino estatal El Tephé-Progreso, a pesar de alertas previas.
Así que ante la indolencia de las autoridades del gobierno estatal, desde temprana hora y sin mayor impedimento comenzaron aquellas acciones de presión social, por parte de indignados habitantes de la comunidad de Xuchitlán, perteneciente al municipio de San Salvador; esto, por organización y convocatoria del delegado comunitario, Gabriel Martínez Pérez.
Como fue informado, en aquella comunidad persiste la indignación y se exige “justicia”, luego del reciente fallecimiento de uno de sus vecinos, Leobardo Hernández Regino, víctima de la confrontación entre policías estatales y lugareños, protagonizada durante una manifestación de protesta, justo enfrente de la sede del Ejecutivo estatal, el pasado día 1.
Ese lamentable acontecimiento alentó la obstaculización de la México-Laredo ocurrió a la altura de la comunidad ixmiquilpense de Julián Villagrán, colindante con el ejido de Xuchitlán; a lo ancho de los cuatro carriles, un grupo de manifestantes colocó algunas llantas y amontonó importante cantidad de piedras, acarreadas con camiones de volteo.
En el caso del cierre de la vía El Tephé-Progreso, este se realizó al píe de la comunidad de Santa Ana Bathá, entronque con el poblado de Tlacotlapilco, ambas del municipio de Chilcuautla. Ahí, los inconformes arrumbaron distintos materiales para construcción y también neumáticos, incinerando algunos de estos, para llamar más la atención.
Hasta le entrega de este reporte, una comisión vecinal de Xuchitlán -al frente del delegado comunitario-, se trasladó a la capital hidalguense, para ser atendida por servidores públicos de la Secretaría de Gobierno, pero continuarían los bloqueos carreteros, mientras no se dieran respuestas favorables a las demandas de los inconformes.